Pedro Sánchez aborda con el primer ministro sueco los asuntos que marcarán la agenda de la Presidencia española del Consejo de la UE

La Moncloa, Madrid

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha mantenido una reunión en el Palacio de la Moncloa con Ulf Kristersson, primer ministro de Suecia, país que hasta el próximo 30 de junio ostenta la Presidencia del Consejo de la Unión Europea.

Este encuentro ha sido de gran utilidad para ahondar en el estado de los principales expedientes que España deberá gestionar a partir del próximo 1 de julio, momento en que nuestro país asumirá la presidencia rotatoria. En este contexto, el presidente Sánchez se ha interesado por las preocupaciones y prioridades de Suecia de cara a nuestra Presidencia, y ha transmitido a Ulf Kristersson la intención de estructurarla en una búsqueda de consensos que evite las políticas de bloques entre los distintos Estados miembros.

Ambos mandatarios han coincidido en el impacto que la guerra de Putin ha tenido durante la Presidencia sueca, y han puesto de relieve que, durante los Consejos Europeos y los Consejos de Ministros de la UE, todos los países han continuado mostrando una determinación común por seguir prestando a Ucrania toda la ayuda que necesite, tanto en el ámbito político, como en el económico, humanitario o militar. "Como tuve ocasión de trasladar el pasado jueves al presidente Zelenski en Moldavia, España seguirá trabajando, como lo ha hecho Suecia, para ayudar a Ucrania en el camino hacia la Unión Europea", ha destacado el presidente Sánchez.

También ha subrayado el apoyo de nuestro país a la integración de Suecia en la OTAN y ha transmitido a su homólogo sueco el deseo de que esta adhesión se produzca lo antes posible, puesto que "contribuirá a hacer a esta organización más fuerte, más cohesionada y más preparada para hacer frente a los retos a los que nos enfrentamos".

Esta guerra injusta e injustificada, ha destacado el presidente Sánchez, ha llevado a la Unión Europea a tomar conciencia de la necesidad de continuar impulsando reformas que estarán en el centro del debate europeo durante la Presidencia española del Consejo. En este contexto, el presidente del Gobierno y el primer ministro de Suecia han abordado la importancia de estudiar las vulnerabilidades de la Unión Europea, la reducción de nuestra dependencia exterior o el impulso de nuestra competitividad.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, saluda al primer ministro de Suecia, Ulf Kristersson, | Pool Moncloa/Fernando Calvo

Ambos han coincidido en la importancia de continuar apostando por la reindustrialización y avanzando en las transiciones verde y digital. Estos son algunos de los asuntos que ambos líderes han tratado al abordar el estado actual de la ley sobre materias primas críticas, la ley sobre la Industria de Cero Emisiones, el reglamento de inteligencia artificial o el paquete sobre descarbonización de los mercados de gas e hidrógeno.

En cuanto a la importancia que la diversificación de las cadenas de aprovisionamiento tiene para Europa, el presidente Sánchez ha hecho hincapié en los acuerdos comerciales pendientes con Latinoamérica. "Es una región con la que compartimos cultura y valores", ha señalado, reiterando la necesidad de avanzar en los acuerdos con Chile, México y Mercosur.

Asimismo, entre los expedientes abordados por ambos líderes se encuentra la reforma del mercado eléctrico. El presidente Sánchez ha recordado que la energética es otra de las vulnerabilidades que la guerra en Ucrania ha puesto de manifiesto, y ha transmitido su intención de llegar, antes de que finalice este año, a un acuerdo que garantice a nuestros consumidores y empresas un aprovisionamiento seguro, a precios razonables y en línea con los objetivos de neutralidad climática.

Los dos mandatarios han tenido ocasión de abordar otros expedientes que la Presidencia española del Consejo de la UE tendrá en su agenda, como la reforma de las reglas fiscales, la revisión de presupuesto plurianual o la conclusión del Pacto de Migración y Asilo.

Además, el presidente Sánchez ha hecho hincapié en uno de los objetivos pendientes: preparar a la Unión Europea para afrontar nuevos retos con un nuevo contexto geopolítico en marcha y con una composición más amplia. "Debemos reflexionar sobre nuestro futuro y sobre la forma en que tomaremos las decisiones cuando estemos ante una Unión Europea más grande, más diversa y más compleja", ha subrayado, recordando que este asunto será de vital importancia para contribuir a la nueva Agenda Estratégica para el próximo periodo legislativo europeo (2024-2029).