El secretario de Estado de Educación y FP, Alejandro Tiana, y el subsecretario de Educación y FP, Fernando Gurrea, han acompañado a la ministra en la ceremonia.
"La imposición de una condecoración como la Orden Civil de Alfonso X el Sabio implica, por definición, un componente educativo de gran valor y trascendencia. Especialmente cuando se piensa en la contribución intelectual de cada uno de los premiados al mundo de la educación desde ámbitos quizás diversos, pero además, tan a menudo, complementarios", ha subrayado la ministra y también portavoz del Gobierno durante la ceremonia.
En concreto, se ha concedido la Gran Cruz de la orden a Francisco López Rupérez, expresidente del Consejo Escolar del Estado (2012-2016), y a Álvaro Marchesi Ullastres, ex secretario de Estado de Educación (1992-1996). Pilar Benejam i Arguimbau, Teresa Codina i Mir, José María Hernando Huelmo, Ramón González Mancha, Jorge Sáinz González y Ángel de Miguel Casas han recibido la Encomienda con placa.
René Jesús Payo Hernanz, académico de número de la Real Academia Burgense de Historia y Bellas Artes, y el periodista José María Íñigo Gómez (a título póstumo) han sido distinguidos con una Encomienda. La ministra ha entregado, además, cinco cruces a Luis Felipe Fernández García, María del Carmen Forcada González, Francisca Fresno Gutiérrez, José Luis Campelo Álvarez y Miguel Ángel Calzada Herrero.
Como reconocimiento a su contribución al desarrollo de la cultura científica y artística en España y su integración en el sistema educativo, la Fundación Residencia de Estudiantes ha recibido la Corbata de la orden, mientras que la Asociación de Maestros Rosa Sensat ha recibido una Placa de Honor, por su apuesta por la calidad y la innovación de una escuela pública y democrática.
"Hoy tengo el enorme honor de poder distinguir a todo este grupo de amigos y amigas que se han significado por los méritos contraídos en la educación, la ciencia, la docencia, la investigación o que han prestado algún servicio relevante en la administración educativa", ha señalado Celaá.
La Orden Civil Alfonso X el Sabio se estableció en 1939 y su precedente era la Orden Civil de Alfonso XII. Su finalidad es premiar a personas físicas y jurídicas por los "méritos contraídos en los campos de la educación, la ciencia, la cultura, la docencia y la investigación o que hayan prestado servicios destacados en cualquiera de ellos en España o en el ámbito internacional". El Gran Maestre de la Orden es el rey y el Gran Canciller, el ministro o ministra de Educación.