La Presidencia española logra el acuerdo político de los 27 Estados miembros para las nuevas reglas fiscales de la Unión Europea
Economía, Comercio y Empresa - 20.12.2023
La Presidencia española ha logrado un acuerdo político de los 27 Estados miembros de la Unión Europea para la reforma de las reglas fiscales, durante el Consejo de Asuntos Económicos y Financieros (Ecofin) de la Unión Europea celebrado hoy.
La Presidencia española ha trabajado con determinación para cumplir con el mandato de los líderes de llegar a un acuerdo antes de final de año sobre la base del consenso, escuchando a todos los Estados miembros y promoviendo una respuesta constructiva para cerrar uno de los expedientes más complejos de la legislación europea.
Logrando el acuerdo, la Presidencia española cumple así con el mandato que los líderes europeos habían manifestado en el Consejo Europeo de la UE de alcanzar un acuerdo antes de final de año.
Durante la reunión, los Estados miembros han mostrado su acuerdo con la propuesta de la presidencia española, que define unas reglas fiscales adecuadas para el siglo XXI, claras, creíbles y que garantizan las necesarias inversiones y reformas en los ámbitos estratégicos clave para el futuro de la Unión Europea.
Ha habido más de cuarenta reuniones a nivel técnico, contactos constantes con todos los Estados miembros y distintas propuestas para llegar a un acuerdo político y cerrar uno de los expedientes más complejos de la legislación europea.
"El acuerdo sobre las reglas fiscales es una noticia importante y positiva; dará certidumbre a los mercados financieros y reforzará la confianza en las economías europeas. La Presidencia española ha liderado un proceso de negociación que ha culminado hoy en el acuerdo de los ministros de finanzas de los 27 Estados miembros, cumpliendo así con el mandato del Consejo Europeo", ha afirmado la vicepresidenta primera y ministra de Economía, Comercio y Empresa, Nadia Calviño.
Una propuesta equilibrada
El acuerdo se ha forjado sobre la propuesta de la presidencia española: reglas más simples, adaptadas a la realidad post-pandemia, realistas y equilibradas para reducir la deuda de forma compatible con el impulso a la inversión y el crecimiento inclusivo.
La propuesta de la presidencia española preserva los dos elementos fundamentales de la propuesta de la Comisión Europea: se trata de reglas adaptadas a las características de cada Estado Miembro, basadas en un único indicador - la senda de gasto.
Salvaguardas para garantizar la reducción de deuda, control, y preservar el espacio para inversiones en el ámbito verde, digital, social y defensa
Sobre la base de la propuesta del Ejecutivo comunitario, se han introducido a lo largo de la negociación cuatro tipos de salvaguardas para garantizar la reducción sostenida de la deuda, el impacto contracíclico, un sistema de control y supervisión de estas reglas fiscales más realista y más eficaz y, al mismo tiempo, protección para las inversiones públicas que corresponden a las prioridades europeas en el ámbito verde, digital, social y de defensa.
En definitiva, que todo el conjunto de las reglas fiscales garantice una política económica contracíclica, el crecimiento económico inclusivo y la estabilidad en toda la Unión Europea.
Un nuevo marco adaptado a la realidad post-pandemia que refuerza el papel de los países y de los Planes de Recuperación
Partiendo de la exitosa experiencia de los Planes de Recuperación, el nuevo marco refuerza el protagonismo de los países, que tendrán que presentar sus propios planes fiscales de 4 años, con la posibilidad de ampliar el periodo de ajuste fiscal a 7 años para permitir la ejecución de las inversiones y reformas estratégicas.
Esto se traducirá en un mejor cumplimiento, ya que las condiciones estarán alineadas con las prioridades de los gobiernos y sus necesidades específicas.
Para facilitar la transición al nuevo marco, se establece un tratamiento especial de las reformas e inversiones de los Planes de Recuperación Next Generation, así como de la cofinanciación nacional de otros fondos europeos.
Se centra en un único indicador para todo el periodo de ajuste: la senda de gasto para cada país, recogiéndose en una "cuenta de control" las posibles desviaciones acumuladas.
Salvaguardas para garantizar la reducción de la deuda y margen fiscal
Incorpora salvaguardas con umbrales de referencia para todos los países con el fin de garantizar una reducción efectiva media anual de 1 punto porcentual de la ratio de deuda para países con deuda superior al 90% y 0,5% para los que estén entre 60% y 90%.
Un margen fiscal de déficit estructural del 1,5% del PIB por debajo del 3% en el brazo preventivo.
Una velocidad de ajuste del déficit estructural primario para estos países del 0,4% del PIB al año, que podrá reducirse al 0,25% en caso de extensión de 4 a 7 años.
Las reglas contemplan un régimen transitorio hasta 2027 que suaviza el impacto de la subida de la carga de intereses, protegiendo la capacidad de inversión.
Próximos pasos
Una vez alcanzado el acuerdo político, se espera que en breve comiencen los debates sobre el texto acordado en la fase de negociación interinstitucional, conocida comúnmente como trílogos, en las que participan tres instituciones de la Unión Europea -Consejo de la UE, Parlamento Europeo y Comisión Europea-.
Tras el consenso alcanzado hoy proseguirán los trabajos técnicos para completar el texto jurídico de conformidad con el acuerdo provisional. Una vez finalizado, el texto se presentará a Comité de Representantes Permanentes de los Estados miembros (Coreper) para su aprobación.
El acuerdo revisado deberá ser adoptado formalmente por el Parlamento y el Consejo antes de que pueda publicarse en el Diario Oficial de la UE y entrar en vigor en 2024, con efectos a partir de la planificación presupuestaria de 2025.
Cronología para alcanzar el acuerdo
En el primer ECOFIN bajo Presidencia española de julio se logró el apoyo unánime a los cuatro pilares que debían conformar el acuerdo: equilibrio institucional, salvaguardas comunes, incentivos para inversión y reformas, y una aplicación creíble.
Los meses posteriores se intensificaron los contactos bilaterales y las reuniones a todos los niveles, hasta que en el ECOFIN de noviembre la Presidencia española presentó un nuevo documento como zona de aterrizaje o 'landing zone' que ha servido de base para el acuerdo político y la negociación final sobre el texto legislativo.
La favorable acogida a este documento permitió avanzar de manera decisiva en el texto legal correspondiente en las siguientes semanas para finalmente encontrar el consenso que se ha materializado hoy.
La presidencia española ha trabajado intensamente para cumplir el mandato de los líderes de llegar a un acuerdo antes de final de año. Ha habido más de cuarenta reuniones a nivel técnico, contactos constantes con todos los Estados miembros y distintas propuestas para llegar a un acuerdo político y cerrar uno de los expedientes más complejos de la legislación europea.