La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), perteneciente al Ministerio de Consumo, lanza una nueva campaña de sensibilización bajo el título 'Pon más héroes en tu plato y llena tu vida de superpoderes'. Tiene como objetivo el fomento de una alimentación saludable y la lucha contra la obesidad infantil.
La campaña se difundirá en medios online del 12 de noviembre al 6 de diciembre e incluye varios spots de video, cartelería, infografía, filtros para redes sociales como Instagram, WhatsApp, Tik Tok, otros materiales gráficos y una landing page específica con juegos en línea dirigidos a los menores. Está previsto realizar acciones en el entorno digital con formatos display/video multidispositivo, a través de YouTube, Facebook, Instagram y Tik Tok, como principales redes sociales.
La campaña trata de influir en las pautas de consumo y estilos de vida que favorecen la aparición de la obesidad, promover mejores hábitos alimentarios, incrementar el consumo de frutas, verduras y legumbres y fomentar la actividad física en la población infantil como público objetivo principal.
La campaña también incide de forma secundaria en el entorno familiar, reforzando el mensaje sobre padres y madres a través del uso de redes sociales y plataformas de video de consumo directo y combinado con sus hijos.
Cifras de obesidad en España
Desde hace más de dos décadas en España, como en el resto de Europa, las cifras de la obesidad suponen un serio problema de salud y un verdadero reto de salud pública. El problema es especialmente grave en población infantil, con un 23,3% de sobrepeso y un 17,3% de obesidad en niños y niñas de 6 a 9 años, y un 4,2% de los escolares con obesidad severa. Es decir, el 40,6% de la población infantil de 6 a 9 años tiene exceso de peso (Aladino 2019).
Otro aspecto a destacar es la relación entre obesidad y pobreza. La prevalencia de obesidad es casi el doble en los escolares de familias con menor nivel de ingresos con respecto a las de mayor nivel y se sitúa en un 23,2% frente al 11,9% (Aladino 2019).
Existe una clara relación entre obesidad y desigualdad en el acceso a una alimentación saludable y estas desigualdades deben también tenerse en cuenta a la hora de hacer frente a las causas subyacentes de la obesidad.
El consumo de alimentos saludables es menos frecuente en las familias con menor nivel de ingresos, con un 51% de menores que realizan un consumo diario de frutas, frente al 67% de los menores en familias en el tramo de ingresos más alto. Además, el consumo de bebidas azucaradas, en tres o más veces a la semana, es de un 18,7% en los menores que viven en familias con ingresos más bajos. La cifra se sitúa en un 3,8% en menores que viven en familias con ingresos más altos (ENS 2017. Informe Alto Comisionado para la lucha contra la pobreza infantil sobre Obesidad Infantil y Desigualdad de Renta, 2019).
El porcentaje de menores que cumplen las recomendaciones de consumo diario de frutas y verduras (400 gramos o 5 porciones de fruta y/o verduras al día) es muy bajo, sólo alcanza el 2,4% de los menores. Aspecto especialmente preocupante dado la importancia del consumo de frutas y verduras en el marco de una alimentación saludable (ENS 2017).
Una de las muchas barreras que existen a la hora de abordar este problema es la percepción de la familia sobre la situación ponderal de sus niños y niñas. El 69,1% de los progenitores de escolares con exceso de peso considera el peso de sus hijos como normal (Estudio Aladino 2019).
La prevalencia de sedentarismo en el tiempo libre es de un 14% en menores de 5 a 14 años. El porcentaje de menores de 15 años que pasan una hora o más a diario frente a una pantalla es del 73,9% entre semana y del 82,6 % en fines de semana. Este porcentaje es superior en niños que en niñas y aumenta progresivamente con la edad, manteniéndose el aumento en los fines de semana en ambos sexos y en todos los grupos de edad (ENS, 2017).
Muchos menores crecen actualmente en un entorno obesogénico que favorece el aumento de peso y la obesidad. El desequilibrio energético se debe a los cambios en el tipo de alimentos y en su disponibilidad, asequibilidad y comercialización, así como al descenso en la actividad física, pues se ha incrementado el tiempo dedicado a actividades de ocio sedentarias.
El problema de la obesidad infantil se asocia a graves consecuencias para la salud, tanto a corto como a largo plazo, afecta a la calidad de vida de estos escolares, y se relaciona con baja autoestima, con las consecuencias que esto genera en la infancia, de rechazo, fracaso escolar y exclusión. Además, según la Organización Mundial de la Salud, alrededor del 60% de la población infantil con exceso de peso arrastrará esta circunstancia a la vida adulta.
Todos estos datos justifican la pertinencia de esta campaña dirigida a la población infantil y que busca conseguir mejores hábitos alimentarios, incrementando el consumo de frutas, verduras y legumbres y fomentando la actividad física en la población infantil como herramientas efectivas para la lucha contra la obesidad en este grupo especial de la población.
Plan integral
Esta nueva campaña forma parte de la línea de trabajo conjunto que mantiene el Ministerio de Consumo de la mano de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), para la puesta en marcha de acciones de sensibilización e información en alimentación saludable dentro del plan integral para fomentar la alimentación saludable. Este plan está conformado por cuatro ámbitos de trabajo: etiquetado, fiscalidad, publicidad y formación e información a los consumidores. Con ello, Consumo pretende que la ciudadanía tome consciencia de que la buena alimentación es una cuestión de salud pública.
Etiquetado de productos
La primera de las medidas del plan integral de Consumo es la redacción de un Real Decreto que desarrolle el sistema de etiquetado frontal de productos Nutri-Score en España. En este momento, la medida se encuentra en elaboración y Consumo prevé presentar el Real Decreto en las próximas semanas para someterlo a información pública. La intención de Consumo es que el Consejo de Ministros lo apruebe a lo largo del primer semestre de 2021.
Con esta iniciativa, España se sumará a Francia, que ya tiene implementado el sistema, y a Bélgica y Alemania, que han anunciado a la Comisión Europea su deseo de ponerlo en marcha.
Durante su comparecencia en el Senado en el mes de junio, Garzón explicó que este sistema de etiquetado frontal es voluntario para las empresas que decidan establecerlo, a falta de que la normativa europea decida sobre su obligatoriedad.
La decisión de implementarlo en España supondrá que el país forme parte del grupo, junto a Francia y Alemania, que lidera una posición en Europa favorable a establecer un sistema vinculante y accesible para todas las personas.
Publicidad de alimentos poco saludables
La segunda de las medidas, en relación con Nutri-Score, también avanza con el diálogo entre el Ministerio de Consumo y el sector de la industria alimentaria con el fin de reforzar el Código PAOS. Este sistema supone la actual autorregulación de las empresas en la publicidad de alimentos destinada a menores que Consumo quiere endurecer.
Consumo desea que el diálogo siga avanzando con los sectores implicados para que la regulación de la publicidad se pueda realizar en próximos meses de forma que Nutri-Score y el refuerzo del Código PAOS vayan de la mano.
Fiscalidad
La tercera de las medidas del plan integral se basa en una reforma de la fiscalidad de la alimentación en España. El Gobierno lleva meses trabajando para poner en marcha medidas que desincentiven el consumo de azúcares y de otros alimentos de cierta nocividad para la salud.
Así, se recoge en el Proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2021 que acaba de iniciar su recorrido parlamentario. En concreto, se establece el incremento del tipo impositivo en el IVA a las bebidas con azúcares o edulcorantes añadidos.
Con ello se elimina la aplicación del tipo reducido del IVA para bebidas refrescantes, zumos y gaseosas con azúcares o edulcorantes añadidos con lo que se persigue, por un lado, internalizar la externalidad negativa generada por el consumo de dichas bebidas. De otro lado, se pretende seguir las recomendaciones de numerosos organismos internacionales que recomiendan a España limitar la aplicación de tipos reducidos en el IVA.
El Gobierno estima que la introducción de esta medida conllevaría un incremento de la recaudación de 400 millones, 340 en el 2021 y el resto en el 2022.