Intervención del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la inauguración del Encuentro empresarial España-China

10.9.2024

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China

Secretaria de Estado de Comercio, ministro, Vicealcalde, presidenta de CEOE Internacional, Directora General de la Cámara de Comercio de España, empresarios y representantes de las empresas:

Muy buenos días a todos.

Quiero comenzar agradeciendo su hospitalidad al Sr. Hua, Vicealcalde de esta ciudad fascinante. Una urbe cargada de historia y que, al mismo tiempo, es un ejemplo de dinamismo y de modernidad.

Shanghái representa como pocas ciudades el éxito económico de este gran país. Por eso, no había un lugar mejor para iniciar la segunda parte de mi viaje a China. Una visita en la que ha ocupado y va a ocupar un lugar muy destacado la colaboración empresarial entre nuestros países. Colaboración, a fin de cuentas, entre los verdaderos protagonistas de nuestras relaciones económicas.

Las relaciones entre naciones, se ha dicho antes, son un sistema complejo con numerosos componentes, dimensiones y actores. Pero si hay un aspecto que destaca por encima de los demás son las relaciones económicas, comerciales, empresariales y de inversión.

Unas relaciones que se han venido intensificando en los últimos años, lo que refleja el alto grado de cooperación empresarial en nuestros respectivos países y en terceros mercados. Son estos vínculos de confianza mutua y de amistad los que nos proponemos seguir reforzando. Especialmente en sectores como la economía verde o la tecnología industrial avanzada, que para ambos países suponen ejes fundamentales de nuestro crecimiento sostenible.

Porque China es un socio económico clave para España, el principal en el continente asiático. Lo es hoy, y las perspectivas son muy alentadoras. Porque las nuestras son dos economías con un crecimiento robusto y sostenido, altamente complementarias y con capacidad para integrar más y mejor sus cadenas de valor.

España apuesta por una relación con China basada en la apertura: queremos más comercio e inversiones con China.

Queremos también una Unión Europea y una China abiertas al mundo, más allá de las realidades geopolíticas y geoeconómicas.

Por esa razón, apostamos por el diálogo honesto para reconducir tensiones existentes, que en gran medida son resultado del anuncio de la imposición de aranceles a los vehículos eléctricos chinos.

¿Y qué es lo que proponemos desde España? Lo que propugnamos, en definitiva, es una solución negociada y acordada en el marco de la OMC, que ayude a desarrollar unas relaciones económicas, equilibradas, justas, y que evite cualquier tipo de guerra comercial que no beneficiará a nadie.

Señoras, señores

A escala global, China es el mejor ejemplo de crecimiento y de una trasformación económica culminada con éxito. Son varios los factores que justifican la extraordinaria competitividad de un país que se ha convertido en una potencia mundial: una mano de obra cada vez más cualificada, un tejido empresarial cada vez más competitivo, la inversión en infraestructuras, innovación y tecnología, y el aprovechamiento de las economías de escala. También lógicamente la cadena de valor y de suministro integrada. Todo ello explica una transformación sin parangón en su historia.

Las necesidades actuales de China abren grandes oportunidades para las empresas españolas. El Plan Quinquenal, con su énfasis en el incremento de la demanda interior de consumo y en el impulso a sectores como la tecnología digital, la urbanización y la modernización rural o las energías limpias, hace que el mercado chino sea cada vez más relevante para un país como España, que cuenta con empresas punteras en estos ámbitos.

Y también existen oportunidades de ampliar nuestras exportaciones en los sectores de consumo, alimentación o tecnología industrial avanzada, donde las empresas españolas ya estáis muy presentes.

Creo que son oportunidades que debemos aprovechar. Porque, si bien China es nuestro primer mercado de exportación en Asia, también representa el 90% del déficit de la balanza comercial española en 2023.

Existe, pues, un amplio margen para intensificar y equilibrar nuestras relaciones comerciales, y queremos que así sea. Pero es en el campo de las inversiones donde creo que existe un mayor potencial.

Por supuesto, es una excelente noticia que cada vez haya más empresas españolas invirtiendo en China. Pero también creo que España representa un gran atractivo para la inversión, y me alegra que cada vez haya más empresas chinas que así lo consideren.

Porque pocos países ofrecen oportunidades de inversión tan favorables, con un entorno abierto y competitivo, como las que ofrece España. Y permítame que les dé tres razones.

La primera de ellas es que España es la cuarta economía de la eurozona. Crece en estos momentos a una tasa superior a la de sus socios europeos. En el segundo trimestre de este año, cuadruplicamos el crecimiento medio de la UE y también de la zona euro. Y, lo que es más importante, hemos establecido unas bases sólidas para que esto siga siendo así en los próximos años. La orientación de nuestra economía hacia la innovación, la digitalización y la descarbonización, hace de España un destino atractivo y seguro para la inversión y para el comercio internacional.

La segunda razón que justifica el interés de España para los inversores es nuestra ubicación estratégica como puente natural entre Europa, América Latina y el Caribe y el Norte de África. Una situación natural que se refuerza con unas infraestructuras de primer nivel y un marco legal sólido y transparente. Fortalezas que hacen de nuestro país una base de operaciones ideal.

En tercer lugar, España dispone de un ecosistema empresarial dinámico, con un know-how tecnológico de vanguardia en numerosos campos. Junto a ello, poseemos un capital humano muy cualificado, adaptable y con una creciente especialización en alta tecnología. Un activo que permite a las empresas innovar y responder rápidamente a los cambios del mercado.

Las áreas en las que podemos ampliar nuestra colaboración son muchísimas. Por citar las más importantes mencionaría vehículos eléctricos y su cadena de valor, el hidrógeno verde, las infraestructuras sostenibles, la economía circular o la eficiencia energética. Todas ellas tienen un enorme potencial para generar riqueza, para crear empleos de calidad y un futuro más sostenible tanto en China como en España.

Pero no queremos que esta relación se quede solo en los intercambios bilaterales: aspiramos a seguir extendiéndola en terceros mercados.

Empresas españolas y chinas actúan ya como socios globales, y suman sus capacidades, por ejemplo, en América Latina. Estoy convencido de que debemos impulsar nuestra cooperación en mercados con un enorme potencial, como son el continente asiático o el continente africano.

La prueba material de esta voluntad de cooperación está hoy aquí, reunida en este encuentro empresarial: son ustedes, los empresarios y empresarias españoles y chinos que, con sus negocios, operaciones e inversiones crean riqueza y puestos de trabajo.

Más allá de las tensiones geopolíticas que vive el mundo, y también las comerciales, más allá de las dificultades, ustedes ven oportunidades y las hacen realidad. En España, una puerta de entrada estratégica a Europa, con su sólida infraestructura, con mercados dinámicos y compromiso con la sostenibilidad y la innovación, tienen a su aliado.

Y en China, con su escala incomparable, sus rápidos avances tecnológicos, sus infinitas posibilidades de crecimiento y expansión, también España ve un horizonte de oportunidades.

Les insto, pues, a explorar nuevas vías de cooperación: desde la manufactura avanzada hasta la energía verde. Desde los servicios digitales hasta la agricultura sostenible. Desde el turismo a las finanzas.

No dejemos pasar esta oportunidad. Que aquello que nos une domine sobre las posibles diferencias. Sumemos esfuerzos para superar dificultades. Porque, como reza el proverbio chino, "de las nubes más negras cae el agua más limpia".

Con respeto mutuo, objetivos compartidos y también con alianzas innovadoras, vamos a transformar desafíos en oportunidades, vamos a construir puentes donde otros solo ven barreras, y vamos a abrir vías de colaboración que refuercen nuestras economías.

Muchas gracias, xi xiè.

(TranscripcióneditadaporlaSecretaríadeEstadodeComunicación)

(Intervenciónoriginalenespañol)