IFEMA
INTERVENCIÓN DEL PRESIDENTE DEL GOBIERNO, PEDRO SÁNCHEZ
Buenas tardes, querido José Vicente, Presidente de IFEMA, Ministra, autoridades, en fin, miembros y representantes de este sector tan diverso, como es el de la movilidad sostenible.
Quisiera, en primer lugar, felicitar a los organizadores de este foro. También agradecerles la ilusión, el esfuerzo, la propuesta, el debate, y muy especialmente la transformación hacia esa movilidad sostenible que necesitamos en nuestro país.
Vivimos tiempos, como bien decía antes José Vicente, de una extraordinaria incertidumbre. Y estamos atendiendo, yo creo, que lo urgente. Lo urgente es proteger a las familias, es proteger a las empresas ante las consecuencias, en primer lugar, de una pandemia, y ahora mismo las consecuencias económicas y sociales de una guerra a las puertas de Europa.
Pero hoy no existe realmente, si lo pensamos, diferencia entre lo realmente urgente y lo realmente importante. Porque tanto lo urgente como lo importante es dar respuesta a esas consecuencias de la pandemia y de la guerra, como también que ninguna de las dos sirva, y esto es lo que me gustaría subrayar en esta intervención, no sirva como excusa para aplazar transformaciones que necesita España para seguir avanzando y ganar su futuro.
Creo que este foro, Presidente de IFEMA, es el mejor ejemplo de vuestra capacidad de resiliencia, de vuestra ambición por transformar, de la imprescindible colaboración, también, entre lo público y lo privado, otra de las principales lecciones que podemos extraer de esta pandemia, y, sin duda alguna, también la fortaleza de las empresas y del conjunto de la sociedad española.
Ambas comparten una habilidad, yo diría, que especial. Especial para hacer frente a las dificultades y para adaptarse a nuevos escenarios como los que se están imponiendo y también abriendo ante nosotros.
En marzo de 2020 recuerdo que… He visto antes a la Secretaría General de Transportes, que formó parte, evidentemente, del Estado de alarma y de las autoridades que gestionamos ese momento tan delicado de la historia de nuestro país.
En marzo de 2020, como decía, se paralizó el mundo a causa de una pandemia, de un virus desconocido para la ciencia, como es el virus del Covid-19. Se cerraron prácticamente todos los espacios aéreos en Europa, en Asia, en América. Se vaciaron las carreteras, las autopistas. Se limitaron al máximo los trenes. En definitiva, lo que teníamos que hacer era limitar prácticamente a cero la movilidad entre ciudades, entre personas, la conexión, en definitiva, de todos los compatriotas en nuestro país. Los coches desaparecieron del paisaje de las ciudades, donde durante semanas se oyó solamente un silencio que a todos nos devino extraño.
Nunca olvidaremos a quienes hicieron posible entonces que llegara el material médico que necesitábamos, precisamente, la fase más dura de la pandemia. Y también a quienes mantuvieron llenas las estanterías de los supermercados para que pudiéramos, en fin, vivir nuestro día a día de la manera más normal posible, en unas circunstancias tan extraordinarias como las que vivimos entonces.
Pero también, y eso es lo que me gustaría recordar, también a quienes nos permitieron repatriar a nuestros compatriotas que quedaron atrapados fuera de España. A quienes más recientemente han colaborado para que más de 125.000 ucranianos y ucranianas refugiados pudieran llegar a nuestro país.
Hoy, señoras y señores, vivimos en un contexto completamente distinto. Es cierto que Europa y el mundo vive en una situación de una extraordinaria incertidumbre generada por una invasión política, ilegal, injusta y justificada. No lo olvidemos nunca, de un miembro permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, de Rusia, que está poniendo en solfa precisamente el orden internacional, cuyo uno de sus principales pilares es el respeto a la soberanía nacional y a la integridad territorial de un tercer país como es, en este caso, Ucrania.
Pero me gustaría subrayar algunos datos de especial relevancia.
En primer lugar, el empleo. Hoy mismo hemos conocido por parte del Ministerio de Inclusión y Seguridad Social los datos relativos a la primera quincena del mes de junio.
Hoy España ha superado la cifra de los 20.400.000 afiliados y afiliadas a la Seguridad Social. Contamos con 1 millón de afiliados y afiliadas más que antes de la pandemia a la Seguridad Social. Y en los últimos seis meses se han creado más de 550.000 empleos, y vamos a acabar este mes de junio con 125.000 empleos más.
En definitiva, lo que estamos haciendo es profundizar una tendencia que ya era positiva, antes incluso de la invasión.
Por tanto, estamos creando empleo. Estamos creciendo, desde el punto de vista económico. Y lo estamos haciendo, además, con un empleo de mayor calidad, como consecuencia de un gran acuerdo que logramos con los agentes sociales, empresarios y sindicatos, precisamente, para lograr el frenar uno de los principales talones de Aquiles de nuestro mercado laboral y que está detrás, también, de los problemas de productividad seculares que tiene la economía española, como es, precisamente, la precariedad laboral y la temporalidad en nuestro mercado de trabajo.
Hoy, casi uno de cada dos contratos que se firman son contratos indefinidos. Y eso tiene mucho que ver también con el sentido de Estado, con el deber de país que han mostrado, a lo largo de estos dos años y medio, los agentes sociales, tanto los sindicatos, como también los empresarios y empresarias de nuestro país.
En segundo lugar, un sector que durante la pandemia sufrió, y mucho, como es el sector del turismo y de la movilidad. A día de hoy podemos afirmar que España recuperará este mismo año unos niveles muy semejantes a los previos de la pandemia, igualando los datos de un año extraordinario, como fue, precisamente, el año 2019.
Ya solamente en el mes de abril hemos recibido más de 6 millones de visitantes y se han producido más de 25 millones de pernoctaciones. Y entre el mes de junio y agosto las compañías aéreas tienen programados 32,4 millones de asientos. Es decir, estamos hablando del 94% de los que realizaron en ese año tan importante para el sector turístico y de la movilidad en nuestro país, como fue el año 2019.
Pero también, evidentemente, sabemos que hay incertidumbre, como he dicho antes. Por eso estamos aprobando un Plan de Respuesta a las Consecuencias Económicas de la Guerra. Lo hicimos hace ya tres meses. Va a vencer ahora, el próximo 30 de junio. Y, evidentemente, lo que vamos a hacer es continuar con este Plan, extender estas ayudas a sectores específicos que están, evidentemente, afectados como consecuencia del aumento de los precios de la energía en el continente y, yo diría también, en la economía global.
Simplemente, por mencionar algunos de los ejemplos, estamos hablando de ayudas directas al sector del transporte por valor de 450 millones de euros. Y una rebaja del 60% de los impuestos vinculados con la luz.
Y como saben, este Plan finalizaba el 30 de junio, pero en breve vamos a aprobar su prórroga en el Consejo de Ministros para seguir protegiendo a las empresas y a las familias en este contexto de tan extraordinaria incertidumbre.
Y esa es la misma razón, señoras y señores, por la que hemos trabajado en Europa para reformar un sistema de fijación de precios de la energía, a nuestro juicio, trasnochado e injusto.
Y mientras conseguimos esa reforma estructural a nivel europeo, hemos conseguido, yo creo, que un acuerdo muy importante, a nivel del Consejo, para lograr esa excepción ibérica. En tanto en cuanto somos una isla energética, solamente un 4% de interconexiones tenemos con el resto del mercado energético europeo. Y, por tanto, con ello proteger durante los próximos 12 meses a las empresas, a las industrias y a las familias ante posibles subidas en el futuro derivadas de una intensificación del conflicto bélico en Ucrania.
Señoras y señores, creo que el desafío de la movilidad sostenible no solo afecta a la industria del transporte, esto es evidente, sino que también involucra a todos los poderes públicos, como ha dicho antes la ministra Raquel Sánchez, y, por tanto, a la Administración Central, a la Administración Autonómica y también a la local.
Y en este punto, yo diría que las ciudades deben estar mucho más conectadas, deben ser mucho más inteligentes, también sostenibles, desde el punto de vista medioambiental, pero, sin duda alguna, también social, para que el transporte de mercancías aproveche la oportunidad de la intermodalidad y para avanzar en el desarrollo de nuestra Red Nacional de Transporte, reduciendo, en definitiva, la huella de carbono.
Este desafío involucra también a las instituciones europeas. Conseguir, en definitiva, una movilidad cero en emisiones es quizá el objetivo fundamental, principal, de la hoja de ruta que nos hemos marcado a nivel europeo. El European Green Deal que hará de Europa el primer continente neutro en carbón, precisamente, en el año 2050.
El Gobierno está empeñado en reindustrializar España. En ser una punta de lanza, en eso que hemos llamado la autonomía estratégica, de la cual tenemos que aprender, y mucho, precisamente, después de la pandemia, y ahora, también, como consecuencia de la dependencia, sobre todo, que tienen países a los combustibles que importamos de un país que está poniendo en cuestión, precisamente, los valores, los fundamentos de nuestra pluralidad y de nuestra democracia, como es precisamente la autocracia de Putin.
Aprovechar, en definitiva, las oportunidades que nos brinda la transformación digital, la transición ecológica y, en consecuencia, de hacer una apuesta decidida por la movilidad sostenible.
Por eso, quiero trasladarles que, a pesar de este entorno tan complejo marcado por la guerra de Ucrania, vamos a ayudar al sector del transporte para llevar a cabo los cambios tan extraordinarios que estáis abordando a lo largo de estos últimos años. La transición hacia un modelo de movilidad respetuoso con el medio ambiente, donde pongamos en el centro a las personas. Y sobre todo, a la salud de las personas.
¿Qué es lo que hemos hecho? En primer lugar, como ha dicho la Ministra, vamos a aprobar, está ya en tramitación parlamentaria, una importante ley que tiene que ver con la movilidad sostenible y que se fundamenta en tres pilares que ella ha adelantado también en su intervención.
En primer lugar, la concepción de una movilidad como un derecho, como un derecho y no como un privilegio de los ciudadanos y ciudadanas, y como un elemento de máxima relevancia para lograr, eso que hemos llamado, la cohesión social y la cohesión territorial de nuestro país.
Por primera vez hay una ley que recoge el derecho a una movilidad accesible e inclusiva en todos y cada uno de los lugares, sean las zonas urbanas y también las zonas rurales.
Potenciar, en consecuencia, el transporte público, el uso del transporte público colectivo, las alternativas al vehículo privado. Monitorizar el despliegue de las infraestructuras de recarga eléctrica, algo que, precisamente, también aquí, en IFEMA, tuvimos ocasión de inaugurar ese grupo de trabajo para impulsar las recargas eléctricas a lo largo y ancho de nuestro país.
En segundo lugar, el principio es el de la sostenibilidad medioambiental. El transporte, como todos saben, es responsable de alrededor del 25% de las emisiones de gases de efecto invernadero en nuestro país. También de otras partículas contaminantes nocivas para la salud, para la calidad del aire. Y de casi el 40% del consumo energético en nuestro país. Por tanto, la descarbonización es una prioridad, yo diría, importante, pero, sobre todo, urgente. Y tenemos que hacerlo si queremos cumplir con los Acuerdos de París.
Y por último, el tercer pilar es el del cambio tecnológico y el de la digitalización, que de alguna manera se han de llevar a cabo a través de importantes inversiones, tanto públicas como privadas. Y hacerlo con una regulación adecuada, una regulación que permita el establecimiento de banco de pruebas para aplicaciones de movilidad y, en consecuencia, que podamos innovar en esa conversación entre lo público y lo privado, sobre cuáles son las mejores regulaciones para precisamente incorporar el cambio tecnológico y digital a este principio de la movilidad sostenible.
Estos son los tres objetivos de esta importante ley que ahora mismo están tramitación parlamentaria y me gustaría hacer un recuento de algunas de las medidas y mecanismos que, en todo caso, a lo largo de estos últimos dos años y medio hemos venido impulsando desde el Ejecutivo.
En primer lugar, antes lo ha dicho la ministra, el plan de recuperación, transformación y resiliencia que va a movilizar nada más y nada menos que 13 mil millones de euros destinados específicamente a la movilidad sostenible.
Estas medidas de choque van dirigidas, como hemos dicho en muchas ocasiones, a dirigir a la descarbonización de la movilidad en las ciudades, a la mejora de la calidad del aire, a modernizar la digitalización de las infraestructuras de la red de transportes.
De hecho, ya se han adjudicado y es lo que me gustaría compartir con todos ustedes, proyectos a 171 ayuntamientos, a dos entes supramunicipales para la creación de esas zonas de bajas emisiones, beneficiando directamente nada más y nada menos que 24,5 millones de ciudadanos en nuestro país.
En segundo lugar, me gustaría detenerme por un instante en la dotación histórica de 2 mil millones de euros a las distintas líneas que estamos implementando para el programa MOVES a la hora de instalar los puntos de recarga, también la ejecución de proyectos singulares, del almacenamiento eléctrico y de la adquisición de vehículos eléctricos por parte de los ciudadanos, de las administraciones públicas y también la flota de las empresas.
Algo que inicialmente no lo teníamos previsto, pero que afortunadamente, en esa conversación que hemos tenido con el sector de la automoción en nuestro país, hemos comprendido y hemos incorporado al programa MOVES III.
¿El objetivo cuál es? Bueno, pues el objetivo es contar nada más y nada menos que con al menos 250.000 vehículos eléctricos y 100.000 puntos de recarga pasado mañana prácticamente, porque estamos hablando del año 2023. 5 millones de vehículos eléctricos en 2030.
A día de hoy, tras las ayudas, hay un incremento de entre el 30 y el 50% de las matriculaciones de vehículos electrificados. Y tras la inclusión de las flotas de empresas se ha superado por primera vez el umbral del 10% de todas las matriculaciones.
Todavía queda muchísimo trabajo por hacer, muchísimo camino por recorrer, pero es evidente que vamos en la correcta dirección.
Es decir, puedo anunciarles además, como hice ayer, además, precisamente en el foro, en el grupo de trabajo que inauguramos, puedo anunciarles que se ha agotado ya el presupuesto MOVES III asignado a las infraestructuras de recarga, por lo que ya hemos incrementado en 260, 226 millones de euros, perdón, quiero ser específico. En 226 millones de euros adicionales, los 400 millones de euros inicialmente asignados.
Por lo tanto, estamos aumentando el presupuesto para las infraestructuras de recarga en 226 millones de euros adicionales a los 400 millones de euros.
Avanzamos en definitiva, con paso firme, determinado. No nos conformamos, como he dicho antes. Todavía nos queda mucho. Estamos solamente en un 10%.
Queremos acelerar, hacerlo de la mano de los diferentes actores que están aquí presentes. Y por eso, ayer mismo, como decía, inauguré este grupo de trabajo sobre infraestructura de recarga del vehículo eléctrico en nuestro país.
En tercer lugar, querría recordar aquí precisamente que el Plan de recuperación, transformación y resiliencia destina 3 mil millones de euros a infraestructuras ferroviarias de los corredores del Atlántico y también del Mediterráneo, junto con más de 1.600.000.000 de euros, destinados a la mejora de la sostenibilidad y de la eficiencia energética de la red y otros 1.600.000.000 de euros para mejorar la movilidad cotidiana que nos ofrecen nuestras redes de cercanías.
En definitiva, lo que quiero decirles con todo esto, es que la descarbonización del transporte, además de ser imprescindible para conservar el planeta, para tener un medio ambiente saludable, la calidad del aire que se merecen nuestros conciudadanos también supone un extraordinario desafío para toda nuestra industria.
España, como saben ustedes, es el segundo fabricante de vehículos de la Unión Europea. La automoción representa alrededor del 8% de nuestro PIB. Emplea, o mejor dicho, sí emplea, alrededor de 2 millones de puestos de trabajo. Somos líderes en fabricación de componentes, en infraestructuras también de recarga de vehículos eléctricos. En definitiva, nos estamos jugando mucho en esta transformación industrial desde el punto de vista de la economía nacional.
Por eso, ¿Qué es lo que hemos hecho? Bueno, pues hemos apostado por y nos inspiramos además en estos proyectos europeos estratégicos. Nos inspiramos en ellos para poner en marcha proyectos estratégicos a nivel nacional con fondos europeos.
Fíjense, el primero de estos proyectos estratégicos se aprobó por parte del Consejo de Ministros hace ya unos meses y fue el del vehículo eléctrico conectado con una dotación histórica de 4.295.000.000 de euros de financiación exclusivamente pública.
Bueno, pues permítanme recordarles que el sector de la automoción fue el primero para el que se lanzó un plan específico de apoyo en junio de 2020 para mitigar evidentemente el impacto que tuvo la pandemia sobre este importante sector industrial de nuestra economía.
Ninguna de estas dos cuestiones o políticas y decisiones han sido casualidad. Sabemos el valor que tiene el sector de la automoción en nuestro país, pero si echamos ahora mismo un vistazo a cuál ha sido el grado de respuesta por parte de las industrias a esta convocatoria del Proyecto Estratégico para el vehículo eléctrico y conectado, entre ayudas públicas, las que he dicho antes y la inversión privada, hemos movilizado un, una impresionante cantidad de casi 12 mil millones de euros con 13 proyectos tractores, con 487 proyectos primarios que involucran a 327 empresas de todo tipo y de toda dimensión, desde las grandes empresas a pequeñas y medianas empresas vinculados con toda la cadena de valor del sector de la automoción en nuestro país.
El proyecto estratégico del vehículo eléctrico ejemplifica mejor que ningún otro cómo concibe el Gobierno de España esta reindustrialización, a la cual antes hacía referencia.
Las pequeñas y medianas empresas representan casi el 56% de las empresas que van a obtener incentivos de este proyecto estratégico. Y los proyectos se distribuyen también geográficamente, como antes he comentado con esa visión de cohesión territorial que le queremos dar y que además tiene el sector de la automoción en nuestro país.
Simplemente, por dar un ejemplo de lo que estoy diciendo, la planta de fabricación de Volkswagen Seat se va a ubicar, de las baterías, de las gigafactorías en la ciudad de Sagunto, que sufrió la desindustrialización precisamente en los años 80 del siglo pasado y que hoy tiene una gran oportunidad de convertirse en un polo industrial, nada más y nada menos que la Comunitat Valenciana.
Y una futura planta de baterías, también en Extremadura. Gracias a la alianza entre el grupo Envision-Aesc y el grupo Acciona de nuestro país. Estas plantas van a estar operativas también en muy poco espacio de tiempo, en 2026. Van a emplear de forma directa a 6000 personas, con un impacto también de otras 20.000 de forma indirecta. Y va a fortalecer esto que se llama el Ecosistema Industrial de nuestro país como referente, como referente europeo, yo diría que también global de la automoción sostenible.
Es decir, creo que las alianzas público privadas que hemos ido desplegando también a lo largo de la pandemia como respuesta al COVID, por ejemplo, estoy pensando en la compra centralizada que se hizo a nivel europeo de las vacunas o también todo lo que estamos haciendo a nivel estatal para para convertir a España en un hub de fabricación de estas vacunas del COVID y de otras futuras pandemias que puedan suceder en el planeta. Bueno, pues lo que quiero decir con esto es que con estas colaboraciones público privadas estamos situando a España en la punta de lanza de toda la modernización que tiene que lógicamente ser objeto nuestra economía.
Si quisiera, por último, para compartir con todos ustedes un proyecto estratégico, un PERTE que a mí personalmente me parece de los más ilusionantes, de los más esperanzadores, y es el que hemos aprobado hace muy pocos días en el Consejo de Ministros y Ministras y es el proyecto estratégico aeroespacial que contempla una inversión específica de 160 millones de euros para transformar la industria aeronáutica nacional, con medidas de impulso a la I+D+i para el desarrollo del avión de cero emisiones.
Acelerar y alcanzar en definitiva, estos objetivos de movilidad sostenible, que son los propios de la Agenda 20 y 30 con los que está comprometido el Gobierno de España creo que supone también hacer progresar en la dirección de las metas de la autonomía estratégica a Europa.
La autonomía estratégica es la defensa, es la energía, es la salud ¿Por qué no? También en España pueden ser los semiconductores y los chips, y es también tener una industria potente, sostenible desde el punto de vista económico, financiero, medioambiental y social, en el presente y en el medio plazo.
Esto es lo que nos proponemos desde la Administración General del Estado y es a lo que lógicamente convocamos a todo el sector privado. España está en la cabeza de esa transformación. Porque ya lo estuvo, por cierto, hace más de un siglo, hace más de un siglo, en concreto 120 años. Un empresario pionero, Emilio de la Cuadra, quiso construir vehículos propulsados por la energía eléctrica. La tecnología de aquel momento impidió el éxito del proyecto, pero aquel intento fue decisivo para el desarrollo posterior de la mítica marca hispano suiza. Desde entonces el motor de combustión interna ha dominado el sector de la automoción y hoy la tecnología nos permite cumplir el sueño de aquel empresario español. Un sueño que además construye un mundo mejor. Uno donde la movilidad será un derecho, un derecho más de las personas, de las ciudades con entornos urbanos mucho más humanos y mucho más saludables.
Yo quisiera celebrar y felicitar a los organizadores de este importante evento. Creo que España tiene todas las condiciones, todos los mimbres para convertirse en un hub de referencia europeo y global de la movilidad sostenible. Y en ese sentido, quiero felicitar al Presidente de IFEMA por su visión, por el compromiso de todos los que están aquí presentes y convocarnos el próximo año, estoy convencido a una, a una nueva celebración de este importante foro e incluso, como bien ha dicho antes el Presidente de IFEMA, si ya se abre al público en general, estoy convencido de que será un mayor éxito del que hoy han registrado en su primera convocatoria.
Así que enhorabuena y adelante.
(Transcripción editada por la Secretaría de Estado de Comunicación)