Comparecencia del presidente del Gobierno encuentro "Computación responsable: hacia una nueva era tecnológica" organizado por IBM España

Buenos días.

En primer lugar muchísimas gracias directora Marta, el presidente Horacio, consejero delegado, presidente del grupo Barrabés, también a toda la dirección de esta importante compañía IBM y a toda la familia de trabajadores y trabajadoras de IBM que nos están acompañando en este acto. Muchísimas gracias por vuestra hospitalidad. Y también gracias por creer en España, porque en estos tres años que llevamos al frente del Gobierno, la verdad es que hemos encontrado en IBM una compañía comprometida con el país y comprometida en consecuencia con el progreso de España.

Lo veníamos comentando antes de iniciar este acto. España y Europa, y ahí están los datos de vacunación y de incidencia acumulada están superando los peores momentos de la pandemia. Creo que el éxito de la vacunación implica el que afrontemos con una mayor confianza, si cabe, la recuperación económica. Pensemos cómo estábamos en septiembre del año pasado donde no existía la vacuna, y

hoy estamos con un 75 por ciento de la ciudadanía con vacuna de pauta completa. No sabíamos si íbamos a poder llevar a nuestros niños y niñas a los colegios. Hoy, en cambio, sabemos, gracias al esfuerzo de la comunidad educativa, que el noventa y nueve coma cinco por ciento de las aulas de nuestro país permanecieron abiertas hasta, incluso en momentos en los que no existía vacuna o cuando la vacunación todavía permanecía en porcentajes muy, muy menores.

Por tanto, yo creo que estamos en un escenario completamente nuevo en este mes de septiembre. Estamos afianzando y consolidando esa recuperación económica y lo que tenemos que hacer es que esa recuperación económica sea transformadora, y de eso es de lo que estamos hablando hoy, precisamente con la inversión que anuncia IBM.

Es decir, debemos avanzar en la modernización del tejido productivo, como bien ha dicho la directora de IBM y debe también llegar a todos, porque si la pandemia al final la hemos sufrido todos y todas, la recuperación económica tenemos que hacer el esfuerzo todos, desde el gobierno, las instituciones públicas y también las empresas, para que llegue a todos y cada uno de los rincones de nuestro país y a todos los estratos de la sociedad. En esa recuperación, antes se ha dicho por parte de Horacio y de Marta, la transición ecológica y la transformación digital son los vectores de nuestro progreso.

La digitalización no es solo un sector económico de un valor creciente. Indudablemente lo es. La digitalización está ya transformando todos y cada uno de los sectores productivos de nuestro país.

El objetivo, por tanto, del Gobierno, es acelerar esa transformación digital y situar a España como una como una región, como un país líder en lo que representa el sur de Europa. Tenemos todo lo necesario. Tenemos el apoyo político de todas las instituciones públicas, también de las empresas. Tenemos un entorno, yo creo que perfecto para garantizar esa seguridad jurídica y, en consecuencia, animar a esa inversión privada y los recursos económicos del plan de recuperación de los fondos europeos. Y además, como bien ha dicho antes Marta, la estrategia España Digital 2025, por tanto, es el momento de invertir en digitalización en España. Y ese momento es ahora.

Por eso quiero agradecer hoy el papel como agentes responsables de dicha aceleración digital, en particular a IBM, por su apuesta decidida por España para convertirla en un polo tecnológico de las

infraestructuras, de los datos y también, lógicamente, de los servicios de la nube. Y en este acto, como también ha representado, si me permiten, el anuncio que hizo hace muy pocos días Microsoft en Barcelona, yo creo que estamos demostrando que esta apuesta que estamos haciendo, está generando los incentivos suficientes y el clima adecuado para invertir en digitalización en nuestro país. Es la prueba de la capacidad de innovación. También la voluntad de modernización de las administraciones públicas y de las empresas españolas y de la habilidad para generar, como bien se comentaba antes, alianzas estratégicas entre lo público y lo privado, precisamente para multiplicar el efecto de transformación digital que necesita nuestro país.

España, se ha dicho antes, está poniendo en marcha un ambicioso paquete de inversiones públicas y reformas en el marco de recuperación, transformación y resiliencia. Y en el ámbito de la transformación digital me gustaría destacar cinco elementos fundamentales.

El primero de ellos es el enorme esfuerzo público para crear el entorno adecuado para acelerar la digitalización de nuestra economía.

El segundo tiene que ver con el apoyo a las I+D+I en tecnologías digitales disruptivas que estamos diseñando y ejecutando desde el Gobierno de España.

El tercero es el apoyo público directo, directo a la digitalización de los sectores productivos, de las pymes, también de las administraciones públicas. Nos consta que este es uno de los elementos fundamentales en nuestras conversaciones con el sector privado.

El cuarto es la gran apuesta por la economía del dato. Hoy es un buen ejemplo de ello.

Y el quinto es el carácter inclusivo, creo que también esto es muy importante incorporarlo el carácter inclusivo de estas dos grandes revoluciones, la revolución digital, la revolución ecológica, desde el

punto de vista de la equidad social, territorial, de género y también lógicamente de oportunidades que representan para la gente joven en nuestro país.

En lo que se refiere al primero de los elementos, es decir, la creación de un entorno adecuado para la digitalización de la economía española, el Gobierno de España ya está emprendiendo acciones en distintos aspectos, a mi juicio claves.

En primero el apoyo al despliegue de infraestructuras de conectividad. España, como sabéis, posee la red de fibra óptica más extensa de Europa .El 88 por ciento de nuestra población tiene acceso a esta red. Y este otro dato, además, es incluso más importante aún y es que el 63 por ciento de la población rural tiene ya acceso a la fibra óptica en nuestro país. Esta es una buena cifra, pero es evidente que no es suficiente y por tanto, lo que queremos es ir más allá y nos comprometemos a conseguir esa conectividad universal en 2025, es decir, dentro de muy pocos años.

Nos comprometemos también a acelerar la revolución asociada al uso de la tecnología 5G, a través del apoyo público, y con una inversión además de alrededor de 3 mil millones de euros. Esto en cuanto al apoyo, al despliegue de infraestructuras de conectividad.

En segundo lugar, dichas infraestructuras y la conectividad, y aquí se ha dicho, antes bien, tienen que ser seguras, absolutamente seguras y de ahí nuestra apuesta por el fortalecimiento del ecosistema de la ciberseguridad. Vamos a destinar 520 millones de euros a apoyar al ecosistema español de ciberseguridad para alcanzar el liderazgo mundial en esta materia. Y quiero decirles que ya estamos consiguiendo y avanzando y escalando en esas posiciones, porque España hoy ocupa la cuarta posición mundial en el Índice Global de Ciberseguridad publicado por Naciones Unidas.

Tres, junto con estas infraestructuras físicas y las redes y la ciberseguridad, necesitamos también una regulación que favorezca la innovación en los servicios digitales. Los organismos reguladores deben crear entornos de prueba que permitan a las empresas experimentar con modelos de negocio y tecnologías absolutamente disruptivas a través de lo que se llaman los 'sandbox' regulatorios.

Precisamente, uno de los proyectos innovadores que han sido seleccionados por la Secretaría General del Tesoro del Ministerio de Economía y Transformación Digital, fue presentado por una de las

empresas que hoy nos acompaña, Caixabank consejero delegado, que pretende innovar precisamente mediante un proyecto de identificación biométrica para la prevención del fraude digital y también de blanqueo de capitales. Yo creo que este es el camino que tenemos que seguir en este asunto.

En cuarto lugar, también tenemos que impulsar incentivos al emprendimiento, con nuevas leyes de fomento del ecosistema, de empresas emergentes y de creación y crecimiento de las empresas, que

es una de las principales tareas y labores que tenemos por delante. Estas leyes, a nuestro juicio, deben incluir medidas para la atracción del talento. Estamos absolutamente obsesionados en cómo podemos atraer talento a nuestro país. Cómo podemos construir ese talento. Como por ejemplo, la creación de un nuevo visado para los nómadas digitales, incentivos fiscales a la creación de startups o a la inversión en empresas emergentes. En quinto lugar, un entorno adecuado debe ir acompañado del capital humano necesario. De ahí la apuesta decidida que estamos haciendo por la formación en competencias digitales. Como bien comentaba antes la directora de IBM. España va a dedicar una cifra, yo creo que extraordinaria, formidable, sin precedentes: Tres mil quinientos millones de euros, 3.500 millones de euros para mejorar las competencias digitales de los trabajadores, de los profesionales, la transformación digital de la educación y las capacidades digitales de la ciudadanía.

La puesta en marcha del Plan Nacional de Competencias Digitales va a suponer un reto formidable. Yo creo que muy ambicioso, pero queremos lograrlo. Y es que el 80 por ciento de la población española posea capacidades digitales básicas o avanzadas.

Y por último, simplemente, por poner un ejemplo, se van a formar a más de 700.000 profesores y profesoras y al menos a 300.000 estudiantes de colectivos vulnerables que van a tener acceso a dispositivos digitales. Todo esto se refiere a la creación de un entorno adecuado para la digitalización, un despliegue de infraestructuras, de ciberseguridad, del estímulo a innovación, que es una de las tareas fundamentales pendientes en nuestro país, e incentivos también al emprendimiento y la inversión en capital humano.

En segundo lugar, me gustaría hacer una referencia al apoyo de la I+D+I y al desarrollo de las tecnologías digitales disruptivas, porque creo que todos convenimos en que es necesario trabajar en nuevas aplicaciones del 5G, el desarrollo del 6G, de la inteligencia artificial, de la computación, de las comunicaciones cuánticas, donde España está bien situada y también de la micro electrónica. El Gobierno de España, a este propósito va a destinar 1.500 millones de euros en el marco de los fondos europeos y además va a cumplir con el objetivo de incrementar, como bien se decía antes, la autonomía estratégica tanto de España como de Europa.

El tercer elemento que quisiera compartir con vosotros y vosotras y que mencionaba al principio de mi intervención, es el apoyo público a la digitalización de los sectores productivos.

Habrá una especial atención, lógicamente, la digitalización de lo que representa más de un 70 por ciento de nuestro tejido empresarial, que son las pequeñas y medianas empresas a determinados sectores industriales considerados como tractores y, por supuesto, la digitalización de la administración pública. Esta es una de las tareas pendientes que tiene nuestro país desde hace mucho tiempo y en todos los niveles, no solamente del estatal, sino también el autonómico y el local. Las pequeñas y medianas empresas, como sabéis, van a recibir un paquete extraordinario de apoyo a la digitalización, lo que hemos llamado digital toolkit de más de 3.500 millones de euros y para la digitalización de las administraciones públicas se van a destinar en torno a 3.100 millones de euros.

Yo creo que la apuesta por la economía del dato, que es el cuarto elemento y que está íntimamente relacionada con la importante inversión de IBM, que anuncia hoy que desde luego directora

presidente, estamos profundamente agradecidos del compromiso de nuevo de IBM por España. Yo creo que va a ser fundamental para la prestación de servicios empresariales en la nube.

Esta inversión va al corazón de lo que representa la transformación digital, porque los datos se han convertido ya en algo que voy a decir es obvio, y es que es un recurso que, a diferencia de otros, no se agota con su uso. Y en este sentido, el Gobierno de España está llevando a cabo un intenso trabajo para crear un entorno legal y de financiación propicio al despliegue de la economía del dato.

Me refiero a lo siguiente, se trata de un conjunto de iniciativas que tienen como marco de referencia, como se ha dicho antes, la estrategia España Digital 2025, que se despliegan también en pilares de esa estrategia, como es la Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial. El plan para la conectividad y las infraestructuras digitales. La estrategia para el impulso de la tecnología 5G. Muchos de estos planes han sido elaborados en conversación con el sector privado aquí presente y nos hemos presentado hace ya bastantes meses.

No digo en el año 2021, sino hasta incluso en plena pandemia en el año 2020. Es decir, hemos hecho un esfuerzo no solamente de diálogo, de cooperación público privada, sino también de anticipación para garantizar una cierta predictibilidad a los actores privados a la hora de poder invertir. Y sobre la economía del dato, es verdad que seguro vosotros y vosotras lo conocéis mucho mejor que yo, pero a mí me ha sorprendido, sobre todo la expectación que hay respecto a su evolución en los próximos años. Según los estudios de la propia Comisión Europea del año 2019, la economía del dato en España tenía un valor de veintinueve mil setecientos millones de euros, es decir, vino a representar hace poco más de dos años el 2,5% del PIB español. Se calcula que en 2025 esto podría incrementarse hasta en cincuenta y cuatro mil cuatrocientos millones de euros, es decir, representar nada más y nada menos que el 4,1% del PIB español.

Yo creo que estamos, por tanto, ante una formidable oportunidad para España y para ello necesitamos dos cosas, la primera, una gobernanza adecuada y un segundo lugar, en segundo lugar perdón, los servicios de infraestructura. Los centros de datos profesionales desempeñan un papel esencial dentro de estos servicios de infraestructura. Y también estamos explotando el potencial de este sector en nuestro país, en España. En los últimos cinco años, ahí están las cifras, el crecimiento de la inversión en centros de datos neutrales en nuestro país ha sido el mayor de los, o mejor dicho, mayor que en los últimos 15 años anteriores a esos cinco años.

Por tanto, nuestro objetivo es que esta inversión continúe, continúe hasta colocar a nuestro país al mismo nivel que los líderes europeos. Yo creo que tenemos las capacidades y las potencialidades para poder lograrlo, en infraestructura del centro de datos, y convertirla, en consecuencia, en el nodo digital del sur de Europa. Y ligado a esto, yo creo que las infraestructuras de conectividad deben

proveer la capacidad necesaria para la transmisión rápida y fiable del enorme volumen de datos que la economía del dato supone. Creo que los grandes proyectos tractores de digitalización sectorial que estamos impulsando desde el sector público, pero también con la colaboración del sector privado, en nuestra economía, son fundamentales. Ya sea la economía de la salud, ya sea el sector

turístico, la movilidad, con el vehículo eléctrico y conectado, ya sea el sector agroalimentario, tan importante en nuestro país, o el comercio electrónico. En definitiva, yo creo que ahí podemos dar un salto de calidad extraordinario durante los próximos años.

Este ecosistema sólido e integrador, sobre compartición de datos a nivel nacional, que integre, como bien se ha dicho antes, al sector público, al sector privado, a los centros de investigación y de desarrollo tecnológico, a las grandes empresas, también a las pequeñas empresas. Y, ¿por qué no?, las micro pymes y startups. Y que queremos que se organice, y lo ha dicho antes la directora, en torno al hub español del Gaia-X.

El pasado mes de junio lanzamos, fíjense, porque me comentaban los colaboradores antes este dato y me pareció muy, muy sintomático de cómo está el nivel de expectativa por parte de muchísimos operadores privados. El pasado mes de junio lanzamos una manifestación pública de interés para la constitución, para su constitución, con una gran apuesta por parte del tejido empresarial. Los datos son los siguientes. Hasta 313 empresas participaron, presentando 180 propuestas. Casi dos tercios de las empresas que han pedido participar en la creación de la sección nacional del proyecto son

pequeñas y medianas empresas españolas. Creo que este es un dato que nos anima y que demuestra, efectivamente, cuál es el grado de expectación y de esperanza que muchos operadores privados tienen en esta etapa que estamos abriendo. Señoras y señores, todo esto que acabo de detallar son prioridades, los conocéis bien porque lo hemos hablado en muchas ocasiones, del eje digital del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

Nuestro objetivo es que, al igual que España reconocida mundialmente por su capacidad para el desarrollo de las infraestructuras físicas, también seamos reconocidos por nuestra excelencia en el desarrollo de las infraestructuras digitales necesarias para la economía del dato y el flujo global de información. Yo creo que tenemos las capacidades, el capital humano, los recursos y también, lógicamente, la voluntad de lograrlo.

Y les hablaba al principio de mi intervención de un quinto elemento de actuación de nuestra transformación digital que quisiera destacar para finalizar mi intervención. Y es retomar el hilo de una reflexión que ha hecho también la directora en su exposición, de Marta. Yo creo que la transformación digital debe ser, si queremos que sea un éxito, tiene que ser equitativa. Es decir, tiene que llegar a todos y, por tanto, debemos incorporar el factor o la perspectiva de la inclusión en esa transformación digital. ¿A qué me refiero con ello? Pues que, evidentemente, tiene que suponer oportunidades para todas las generaciones. Tiene que plantearse desde una perspectiva de equidad o de igualdad de género, porque son muchas las mujeres, que por desgracia, se están sintiendo expulsadas de esta transformación digital. Y, sin duda alguna, también debe favorecer la cohesión social y territorial de nuestro país. Yo creo que todos son ingredientes necesarios para que la recuperación económica sea justa. Y prueba de ello es que en el diseño de la transformación digital, el Gobierno ha tenido siempre claro este principio de la integración, de la inclusividad. Por eso hemos aprobado, recientemente, la Carta de Derechos Digitales, que ha sido producto, precisamente, de una conversación durante meses. Precisamente, en los momentos más difíciles de la pandemia con el sector privado. No recuerdo cuántas consultas públicas hemos hecho a los distintos actores, pero han sido unas cuantas durante los pasados meses y, por fin, presentamos hace unos meses esta Carta de Derechos Digitales.

Quiero decirles que no hay ningún gobierno del mundo, quizá uno, aunque desde el punto de vista, digamos, más, más instrumental que de fondo, que es el Gobierno de Chile, ha planteado en su reforma constitucional precisamente incorporar esta perspectiva de una Carta de Derechos Digitales. Pero nosotros lo estamos haciendo, y ahora va a dar también sus frutos y sus pasos en las Cortes Generales, para que esta Carta de Derechos Digitales represente un marco, un marco no digo obligatorio, pero sí un marco a partir del cual podamos ir desarrollando en las Cortes Generales, aprobando las distintas leyes en el Congreso y en el Senado.

Por eso nos alegra mucho lo que ha dicho la directora. Por eso queremos que la conectividad llegue al 100% de la población en nuestro país, como instrumento para afrontar una de las grandes tareas

pendientes, que es el reto demográfico, la cohesión territorial, es decir, las oportunidades de todos los españoles, vivan donde vivan.

Por eso hemos creado el Plan Nacional de Competencias Digitales, que va a prestar especial atención al fomento de las vocaciones STEM entre las mujeres y, por lo tanto, reducir la brecha de género en esta transformación digital.

Y por eso hemos desarrollado la Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial, que va a apoyar también, lógicamente, la transición ecológica a través de algoritmos, que tienen que ser necesariamente verdes.

Bueno, transición ecológica, transformación digital, cohesión social y territorial, igualdad de género y oportunidades para nuestros jóvenes. En definitiva, yo creo que estos son los ingredientes de esta nueva etapa para hacer de la recuperación económica, una recuperación económica transformadora y, por tanto, sostenible en el tiempo y justa. Estoy convencido de que estamos dando los pasos adecuados para poder lograr que España se posicione como un país líder en transformación digital en el entorno europeo.

Yo creo que tenemos todo lo necesario y las inversiones, como las de hoy, que se están anunciando por parte de una gran compañía, como es IBM, nos demuestran, que tanto desde el sector público como desde sector privado, estamos en el buen camino.

Y en ese sentido, de nuevo, al presidente y a la directora, les quiero dar, os quiero dar las gracias.

Muchísimas gracias.