Madrid
INTERVENCIÓN DEL PRESIDENTE DEL GOBIERNO, PEDRO SÁNCHEZ
Buenos días a todos y a todas.
Excelentísimo presidente de la República de Corea, ministros, ministras, embajadores, presidentes de las Cámaras, del Comité Bilateral, CEOE, ICEX y Kotra, señoras y señores.
Me llena de satisfacción inaugurar hoy, junto con el presidente de la República de Corea este encuentro de cooperación empresarial entre España y Corea en el campo de la economía verde y digital, sectores por los que ambos países hemos apostado fuertemente como ejes fundamentales de la recuperación económica y el crecimiento sostenible.
Vivimos tiempos difíciles como consecuencia de la pandemia, ustedes lo saben mejor que nadie. La crisis del COVID-19 ha supuesto un duro golpe para nuestras economías y para la economía mundial. Sin embargo, ahora que el final de la emergencia sanitaria parece que lo vislumbramos cada vez más cerca, queremos seguir avanzando hacia la recuperación, y queremos hacerlo al unísono ambos países.
Corea y España comparten muchas virtudes. Una de ellas, que considero especialmente importante y me gustaría compartir con todos ustedes, es su capacidad de levantarse tras recibir duros golpes como por ejemplo, en la crisis asiática de finales de los 90, o en la crisis que vivimos en España hace tan solo una década.
En España, como saben, hemos alcanzado velocidad de crucero en la mayor campaña de vacunación de nuestra historia y pronto abandonaremos las mascarillas en la calle. La semana pasada administramos más de 3.5 millones de dosis, superando nuestra capacidad histórica de vacunación que era ya de por sí muy alta.
Y en unos días cumpliremos el siguiente hito que se ha marcado el Gobierno de España: tendremos más de 15 millones de compatriotas vacunados con la pauta completa. En unas semanas, el 50% de la población española tendrá, al menos, una dosis. La hoja de ruta es clara y se está cumpliendo. La vacunación total es el puente hacia la recuperación total.
Por ello debemos, tras la vacunación, señoras y señores, una vez más, estar preparados para ser capaces de transformar las dificultades en oportunidades.
Ambos países apostamos, con visión de futuro, por la economía verde y digital. Sabemos que es la mejor manera de asegurar una pronta recuperación tras la crisis del COVID-19.
Y la mejor manera de hacerlo y de establecer a la vez una nueva vía de crecimiento sostenible, justo e inclusivo es apostar en el medio y en el largo plazo precisamente por estos dos ejes.
La transición ecológica y digital, junto también, y me consta que el presidente Moon lo está haciendo de manera muy importante en Corea, el refuerzo del Estado de Bienestar, la cohesión social y la lucha por la igualdad que son los pilares fundamentales tanto del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia español como del New Deal coreano. Ambos se plantean, desde la misma raíz, como una estrategia de transformación estructural de nuestras economías hacia los sectores y modelos de crecimiento del futuro.
Y creo que es precisamente esta visión de medio y largo plazo, tan necesaria en estos tiempos que vivimos, la que hará que nuestra respuesta inmediata no quede obsoleta ante los retos del mañana. Porque buscamos un futuro común en un mundo cada vez más interconectado. La pandemia creo que esto nos lo ha hecho ver de manera mucho más cruda a lo largo de estos últimos meses.
En el campo de la economía verde y digital, ambos países ya contamos con operadores de referencia internacional, algunos de ellos están aquí presentes ampliamente representados. Estas grandes empresas son el motor de la modernización y la transformación que vamos a poner en marcha, pero en el camino estarán acompañadas por una extensa red de pymes y startups innovadoras y punteras. Es a todos ellos a quienes nos debemos.
Permítanme que me detenga un poco en los dos pilares esenciales de la economía del futuro, a la que está dedicado este foro. La economía verde y la economía digital.
En los últimos años, como bien ha recordado el presidente de la República de Corea, España ha sabido situarse a la vanguardia de las energías renovables y la transición ecológica. Muchas de nuestras empresas mantienen una posición de liderazgo en los mercados internacionales gracias a su acreditada experiencia y a la existencia de un know-how tecnológico de primer nivel que yo quiero poner en valor y reconocer.
Tanto España como Corea han decidido afrontar con firmeza el desafío que supone, pero también la gran oportunidad que supone el desafío contra el cambio climático. Y hemos colocado la transición ecológica en el centro de nuestras políticas.
Ambos países hemos adquirido el compromiso de alcanzar la neutralidad climática para el año 2050, lo que nos convierte en aliados en esta conquista. Estoy convencido de que muchas empresas como las representadas hoy aquí serán vitales para que España, la Unión Europea y Corea alcancen sus objetivos.
En segundo lugar, quiero referirme a la transformación digital, a la economía digital. El amplio conocimiento y el prestigio internacional que poseen las empresas coreanas en este campo suponen una gran oportunidad para nosotros, para la economía española y para las empresas españolas.
Quiero remarcar este aspecto, a mi juicio muy importante, porque es de especial relevancia en un día como hoy, en el que hablamos de cooperación entre nuestros dos países y en el que también la Comisión Europea tiene previsto aprobar el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España, que supondrá un compromiso de 140.000 millones de euros para inversiones en los próximos seis años para llevar a cabo esas inversiones transformadoras y de futuro.
Esta tarde, como saben, la presidenta de la Comisión europea viajará a España para apoyarlo, para presentarlo conmigo.
Ser los primeros en lograr la aprobación, junto con Portugal que ostenta la presidencia de la UE durante este primer semestre del año, demuestra que el ejecutivo español ha trabajado duro y se han hecho las cosas bien, pero lo más relevante, a mi juicio, es entender el Plan como lo que es: el mayor esfuerzo inversor y reformista que España va a afrontar durante los últimos 35 años desde su ingreso en la extinta Comunidad Económica Europea. Y el éxito del Plan depende de la unión entre generaciones y de la participación de los jóvenes que es la generación que desgraciadamente se está viendo más afectada por la crisis del COVID.
El Gobierno lo tiene muy claro: cuando hablamos de transformación hablamos de cambio y sin los jóvenes no se puede impulsar un cambio con continuidad, es decir, un cambio duradero.
El Plan está centrado, como ya he dicho, en políticas de futuro que emplean las tecnologías de vanguardia para la movilidad sostenible, el desarrollo de las energías renovables, para la descarbonización de nuestra economía, la digitalización de los sectores productivos estratégicos o el empuje definitivo a la ciencia y la innovación que tanto necesita nuestro país y que tanto admiramos en la República de Corea.
Es un Plan concreto que se compone de 221 hitos y 194 objetivos, es decir, que contiene 415 indicadores de ejecución muy específicos a lo largo de los próximos seis años pero sobre todo concentrados en los próximos tres años. De ellos, 167 corresponden al cumplimiento de las reformas y los 248 restantes a inversiones pactadas con la Comisión Europea.
Nuestro ánimo reformista es el más importante de los últimos 35 años para unir generaciones.
El éxito del Plan depende también en gran medida de nuestra capacidad para lograr una óptima colaboración entre lo público y lo privado para atraer inversiones de primer nivel en sectores punteros, como los que representan, precisamente, las empresas coreanas.
Quiero decirlo expresamente: será un placer y un honor. Va a ser, querido presidente, un orgullo que Corea nos acompañe en esta transformación económica. Será un honor contar con ustedes, presidente.
Por citar solo algunas oportunidades de inversión recogidas en el Plan de Recuperación y que me gustaría compartir también con las empresas coreanas aquí presentes y con las Cámaras de Comercio.
• Destinaremos 13.000 millones de euros a la movilidad sostenible y conectada, con un especial énfasis en apoyar el vehículo eléctrico, incluyendo las fábricas de baterías, en las que España participará como co-inversora.
• Destinaremos 6.000 millones de euros a lograr una transición energética eficiente e inclusiva, con más de 1.500 millones de euros para proyectos en el ámbito del hidrógeno verde.
• Destinaremos otros 4.000 millones de euros para impulsar la conectividad de banda ancha y las redes 5G, la conectividad empresarial y también la ciberseguridad.
• E invertiremos, además, más de 3.500 millones de euros en la digitalización de nuestras pymes.
En todas estas inversiones, las empresas coreanas pueden desarrollar un papel importante, relevante y quiero invitarlas desde aquí a hacerlo.
Permítanme, para finalizar, que insista en este último punto: creo que España y Corea comparten una clara convicción sobre la importancia que tiene la investigación y la innovación en el desarrollo económico. Son pilares básicos para alcanzar un elevado grado de competitividad global y, en definitiva, para lograr un crecimiento económico sostenible en el largo plazo.
En este ámbito, nuestros dos países mantienen una excelente cooperación tecnológica, que yo quiero subrayar hoy aquí, tanto a nivel empresarial como institucional; y esperamos que haya margen para incrementar dicha cooperación a lo largo de los próximos años.
Y, como antes, voy a detallarles tan solo tres cifras del Plan de Recuperación que demuestran la importancia que le estamos dando a la transformación digital en nuestro país durante los próximos años.
• 4.000 millones de euros que destinaremos a reforzar las capacidades de nuestro sistema de ciencia e innovación.
• 3.600 millones para la transformación digital de la población.
• Y 500 millones de euros a aplicaciones vinculadas con inteligencia artificial.
España y Corea son dos de las quince principales economías del mundo, con un tamaño y estructura poblacionales y un nivel de vida prácticamente homologables.
Las previsiones de crecimiento económico para este año nos permiten afrontar la salida de la crisis del COVID-19 con un mayor optimismo. Nuestros planes económicos están sólidamente fundamentados y que contamos además con empresas líderes en la economía verde y en la economía digital y quiero recordar que la mayoría de los organismos nacionales e internacionales, sitúan no solamente a Corea, como ha dicho antes el presidente de la CEOE, sino también a España a la cabeza del crecimiento económico durante este año y el próximo año, después de un año 2020 tan duro como el que hemos sufrido.
La recuperación económica, por tanto, ya está en marcha, como señalan tanto las cifras del mercado laboral como también los indicadores adelantados de actividad.
Las estimaciones más recientes apuntan a un crecimiento económico del 1,6% en el segundo trimestre del año en España, a falta de incluir gran parte de los indicadores de estos meses, que podrían incluso elevar esa cifra.
La recuperación, ahora sí, por fin, está siendo sincronizada tanto a nivel sectorial como a nivel geográfico, entre países. Y los buenos datos de la economía coreana también lo demuestran.
Hay un horizonte claro de recuperación que tenemos la oportunidad de aprovechar, que tenemos el deber de aprovechar en beneficio de nuestros ciudadanos y ciudadanas. Nuestros dos países cuentan además con economías muy abiertas, en las que el comercio internacional y la inversión exterior tienen un peso relevante, importante y que queremos animar.
El turismo también muestra esa apertura. El número de ciudadanos coreanos que eligieron nuestro país como destino durante el año 2016 al año 2019 es un dato que así lo corrobora, que lo certifica.
Corea, querido presidente, es hoy un país admirado y reconocido en todo el mundo. En un contexto geopolítico complicado como el que estamos atravesando ha logrado convertirse en una de las potencias comerciales e industriales más sólidas del planeta.
La importancia de Corea para España es absolutamente indiscutible y aquí está corroborada con la presencia de importantes empresarios y empresarias españoles. Corea es un socio comercial de primer nivel dentro de Asia. Y, a pesar, como usted antes decía, estimado presidente, de nuestra distancia geográfica, ambos somos firmes aliados estratégicos en los grandes asuntos que atañen al presente y al futuro de nuestras naciones.
Ambas naciones compartimos principios y valores similares. Y esto nos permite afrontar juntos los desafíos globales del siglo XXI, promoviendo algo muy importante que es el multilateralismo.
Actos, señoras y señores, como este que celebramos hoy son un claro ejemplo del interés mutuo y la relación estratégica que ya nos une. Por eso, queridos señores, espero y deseo que nuestros países sigan trabajando de manera conjunta para alcanzar el futuro que soñamos.
Porque queremos avanzar juntos y juntas.
Uri jam-qué chon-chin-jap-shi-dá.
Muchas gracias a todos. Gamsa-jamnidá.
(Transcripción editada por la Secretaría de Estado de Comunicación)
(Intervención original en español)