San José (Costa Rica)
Carlos Alvarado.- Muy buenos días, y muchas gracias por acompañarnos en esta Conferencia de Prensa. Señor presidente, sea usted nuevamente bienvenido a Costa Rica, y, en este caso, a la Casa presidencia. A usted y a su delegación.
Han sido dos días en que los intercambios yo los valoro de muy positivos y muy inspiradores, el que hayamos abordado materia de los retos comunes que afrontamos, como en el tema migratorio, como en el tema de la procura por los Derechos Humanos. También, así, nuestras coincidencias profundas en avanzar en materia de la lucha contra el cambio climático, me llena de esperanza todo el trabajo conjunto que podamos hacer, tanto bilateralmente como en foros internacionales y en la Región, en este caso acá en América Latina.
Tengo que decir que hay de parte de Costa Rica un gran agradecimiento por la cooperación de España en muchos campos, tanto en tema de gobiernos locales, en temas de cambio climático y, más recientemente, en los temas de la eficiencia de la cooperación. Eso, para un país como Costa Rica, un país de renta media que aspira a entrar a la OCDE, y agradecerle también su apoyo y el de su Gobierno para ese acceso de Costa Rica a la OCDE, es muy importante para nuestros retos de cara al desarrollo.
Presidente, Pedro, decirle que acá tiene un Gobierno amigo y, particularmente, un amigo en Costa Rica. Me complace muchísimo la visita que ha dado a nuestro país, y que sea una de las prioridades, la Región, que así lo demuestra usted visitándonos muy reciente iniciando su mandato. Eso lo agradecemos, porque demuestra también su deseo de asumir un liderazgo positivo en la Región. Yo particularmente, lo agradezco profundamente, presidente.
Presidente.- Pues muchas gracias.
Buenos días o buenas tardes ya a todos y a todas. Gracias, en primer lugar al presidente de Costa Rica, a la primera dama, a todo el Gobierno que nos ha acompañado a mi delegación y a mí mismo en estos dos días, breves, pero intensos de trabajo y, sobre todo, de conversación mutua entre el Gobierno de Costa Rica y el Gobierno de España.
He de decir que es mi primera visita oficial a Latinoamérica, y no había tenido la ocasión de conocer personalmente al presidente de Costa Rica, pero, después de dos días, he encontrado muchísimas semejanzas entre ambos.
Bueno, él es más joven yo, pero compartimos más o menos en juventud la experiencia en el Gobierno. Él lleva poco más de 100 días al frente del Gobierno, y yo los voy a cumplir en breve espacio de tiempo, y si no me acuerdo, pues estarán los medios de comunicación para recordármelo. Pero, en todo caso, somos dos dirigentes que iniciamos una etapa al frente de los Gobiernos, de Costa Rica y de España, y me he encontrado en el presidente una persona joven, una persona con las ideas claras, de lo que quiere su país, del papel que debe jugar Costa Rica como país estabilizador de la democracia, de los Derechos Humanos, de la lucha contra el cambio climático en el conjunto de América Latina y, en particular, en Centroamérica.
Por tanto, yo quería, en primer lugar, reconocerte ese esfuerzo, presidente; reconocerte, también, el trabajo que estás haciendo, con las reformas que vas a implementar o que estás implementando. Y, desde luego, lo que te puedo trasladar es el compromiso y el apoyo como presidente del Gobierno en el éxito de esas reformas que necesita el país.
Desearte muchísima suerte en desafíos que tienes por delante, como es el tren de Alta Velocidad, que es un proyecto transformador; así, al menos, nosotros desde España lo vivimos cuando se puso en marcha el primer Tren de Alta Velocidad que conectó, en los años 90, Madrid con Sevilla. Y, posteriormente, eso ha ido extendiendo una red muy tupida de trenes de Alta Velocidad que lo que ha hecho ha sido, no solamente favorecer la cohesión social, sino también la cohesión territorial entre los distintos pueblos de España. Con lo cual, muy buena suerte a la primera dama; buena suerte al conjunto del Gobierno en que ese proyecto que transforma y que moviliza y que enorgullece a los países salga adelante en Costa Rica.
Quería también agradecerte, presidente, un hecho que para nosotros fue muy trágico, como fue el asesinato de la compatriota Arantxa Gutiérrez. Y lo único que te puedo decir es gracias, porque se acompañó desde todas las instituciones de Costa Rica a la familia, y porque se volcaron no un departamento, sino distintos departamentos del Gobierno de Costa Rica en el esclarecimiento del asesinato, y, por supuesto, también, en el acompañamiento, como decía antes, a la familia.
Esto para España, el hecho del asesinato, nos conmovió, pero también nos gratificó el ver a una sociedad como la costarricense y a su Gobierno empeñado en que la familia sufriera lo menos posible y, desde luego, se esclarecieran los hechos lo antes posible. Está en proceso. Desde luego, también hemos hablado de ello, y yo quería públicamente reconocer el buen oficio del Gobierno de Costa Rica.
Y, finalmente, trasladar que, efectivamente, en los temas que hemos conversados de la agenda común que tenemos, hemos hablado del cambio climático, como no puede ser de otra manera. Hemos hablado de la cooperación que tenemos que seguir impulsando entre ambos países. Y hemos hablado de algo muy importante, también, que es la migración.
Sabemos, somos conscientes de que Costa Rica es un país que está sufriendo la presión de la migración. Costa Rica sabe que España es un país que también está sufriendo la presión de la migración. Sabemos, poque además, desde hace ya unos cuantos años, existe una cooperación entre ambos países a la hora de cooperar y de compartir experiencias en lo que representa la política migratoria. Y, en esta cuestión, como en otras muchas, también hemos quedado en seguir profundizando, y en seguir cooperando.
Con lo cual, creo que la relación ya no solamente política, sino personal, pues creo que ha sido muy gratamente fructífera, y yo espero y deseo, presidente, que la próxima reunión que tengamos sea en breve, en Europa. Y, por supuesto, siempre será bienvenido a un país hermano como es España.
P.- Sofía Chinchilla del periódico 'La Nación'.
Buenos días, señores presidentes. Muchísimas gracias por el espacio. Precisamente, sobre el tema migratorio, quisiéramos consultarles a ambos, a propósito de la reacción que ha tenido que activar Costa Rica por la crisis nicaragüense y la experiencia de España en un tema similar con la afluencia de emigrantes a Europa. Quisiéramos saber si ustedes conversaron sobre alguna de las experiencias de la UE que podrían, quizás, ser una guía, sobre todo para Costa Rica, sobre qué hacer para enfrentar este tema. Y si hubo algún acuerdo o apoyo en específico que vayan a trabajar en conjunto ambos países para enfrentar este tema.
Y, don Carlos, usted mencionaba que España le ofrece su apoyo en el ingreso del país a la OCDE. Quisiera que, ambos, por favor, nos comentaran de qué tipo de apoyos se trata. Muchas gracias.
Presidente.- Bueno, respecto a la primera de las preguntas, me hicieron prácticamente la misma pregunta en Colombia, a propósito de la crisis migratoria que se está viviendo, lógicamente, con el país fronterizo que es Venezuela. Y la respuesta que di es más o menos la misma que la que le voy a dar.
Mire, nosotros lo que podemos hacer es compartir con el presidente de Costa Rica, con su Gobierno, la experiencia de los flujos migratorios que estamos teniendo. En el caso de España, es evidente que nosotros necesitamos migración, pero necesitamos una migración ordenada, legal. Lo que tenemos que hacer es combatir contra la migración irregular que, al final, es la que lideran, la que impulsan las mafias que trafican con seres humanos. Eso es lo que tenemos que erradicar. Eso es lo que tenemos que abolir. Tenemos que extirpar esa explotación y esa trata de seres humanos por parte de las mafias. Y, por tanto, lo que tenemos que hacer es articular instituciones políticas migratorias, que lo que hagan sean ordenar los flujos migratorios, convertirlos en legales.
¿Cuáles son las tres patas, desde mi experiencia como presidente del Gobierno, en la política migratoria? La primera y fundamental, tiene que haber una conversación, tiene que haber un diálogo con los países de origen y de tránsito. Sin duda alguna. Se tiene que reforzar esa cooperación.
Segundo. Evidentemente, hay que hacer una política de control fronterizo en el sentido que antes he comentado.
Y, en tercer lugar, lo que se tiene que hacer es una política de integración de la migración que llega al país. Eso por un lado.
Y, en segundo lugar, desde mi experiencia, lo que le puedo garantizar es que la migración no es una cuestión de un solo país. O se le da una respuesta regional, o al final será un país el que vaya a sufrir toda la presión migratoria. Eso tampoco es, digamos, asimilable o asumible.
Por eso, nosotros ¿qué decimos? Cuando un migrante pisa territorio español, no está pisando territorio español, está pisando territorio europeo. Y si lo concebimos como tal, estaremos demostrando que la respuesta tiene que ser europea. Tiene que ser solidaria ante el conjunto de Estados miembros de la Unión.
¿Cómo se puede trasladar esa experiencia a Centroamérica o a América Latina? Eso ya son los líderes los que tienen que ver si eso se puede traducir en algo semejante en América Latina o en Centroamérica. Lo que sí que le diré, para terminar esta reflexión, es que España siempre estará del lado de aquellos países que están haciendo un gran esfuerzo por no cerrar las fronteras, sino por simplemente hacer un tratamiento respetuoso con los Derechos Humanos, ordenar la migración y acoger a aquellos que están huyendo, precisamente, de conflictos políticos, como está ocurriendo ahora mismo en Nicaragua.
Sr. Alvarado.- La conversación ha girado alrededor de los temas similares de lo que ha planteado ahora el presidente Sánchez.
Sí, España tiene una experiencia muy importante en esta materia de la cual hemos conversado profundizar en las posibilidades de cooperación, para conocer más el trabajo, sobre todo con las poblaciones que llegan y como hay un proceso no sólo de documentación y de registro, sino también de convivencia, de convivencia pacífica, y, también los entornos a los que llegan a vivir y a trabajar. Entonces, de esa experiencia queremos beneficiarnos y hemos hablado de la posibilidad de profundizar la cooperación en esa materia.
Ciertamente, nosotros hemos tenido un periodo en el que tanto desde el tiempo del tránsito de los emigrantes cubanos, del tránsito de personas extracontinentales, ahora más reciente con el tema de Nicaragua, que Costa Rica ha estado experimentando el incremento de flujos migratorios. Pero Costa Rica no debe y no cambiará sus posiciones en materia de respeto de Derechos Humanos y tránsitos ordenados, seguros y registrados, que es lo que corresponde a un país democrático y que cree en los derechos humanos.
Creo también que con posiciones valientes, que ha adoptado también el presidente Sánchez, tenemos mucha afinidad en esas materias, y creemos que eso nos da un espacio común de trabajo y de intercambio de experiencias.
En cuanto a la OCDE, es un apoyo político. Creo que tenemos que vernos como socios, porque ya no sólo seríamos socios en los foros iberoamericanos, donde somos socios; somos socios por compartir raíces históricas, por cultura, por lengua, sino que también en ese espacio de la OCDE será un espacio más donde podríamos profundizar esa sociedad. Y de ahí que el ingreso de Costa Rica es de interés, y así lo hemos planteado a don Pedro, ¿para qué? Para entender cómo podemos profundizar nuestras alianzas. Creemos que el foro de la OCDE es oportuno y por eso hemos conversado de ello, y lo hemos visto positivamente en la respuesta que nos ha dado el presidente Sánchez.
P.- Miguel González, de 'El País'. Buenos días, presidentes. Quería, bueno, ustedes han dicho que han abordado, supongo que en profundidad, la situación de Nicaragua. Quería preguntarle, en primer lugar, ¿cuál es el diagnóstico que hacen ustedes sobre la situación allí? El Conejo de Derechos Humanos de la ONU ha denunciado violaciones masivas de los Derechos Humanos. ¿Cuál es la solución que ven para la crisis nicaragüense teniendo en cuenta que la actitud del presidente Ortega, en estos momentos, no parece proclive a ninguna concesión ni a ningún diálogo? Incluso ha llegado a reclamar a Costa Rica que le entregue la lista de los nicaragüenses que han pedido asilo político en Costa Rica para tomar medidas contra algunos de ellos. Quería preguntarle esto.
Respecto al presidente Sánchez. Nicaragua es uno de los principales receptores de la cooperación española. Algunos países, debido a lo que ha ocurrido, han suspendido ya la cooperación, es el caso de Holanda y Luxemburgo. Suspender la cooperación siempre es una decisión muy difícil, pero hay una parte de la cooperación española que va dirigida, por ejemplo, al fortalecimiento de la policía nicaragüense. España también ha exportado, en el pasado, material antidisturbios a la policía nicaragüense. Yo le pregunto si España se plantea suspender este tipo de cooperación concreta con el Gobierno nicaragüense.
Y si permite, también, al margen de la situación centroamericana, en España, la situación de Cataluña nos da novedades cada día. El presidente Torra ha contestado hoy a las declaraciones que hizo usted en Bogotá, quiero recordar, diciendo que él se debe únicamente al pueblo catalán. Estamos en una situación que nos recuerda un poco a la de hace un año. Parece que estamos otra vez en vísperas del 'choque de trenes' ¿no?, en vísperas del órdago contra el Estado. Le quería preguntar si usted mantiene su voluntad de reunirse en Barcelona con el presidente Torra. Y si mantiene usted su voluntad de diálogo a la vista de esta escalada, como mínimo declarativa, que estamos viendo. Muchas gracias.
Sr. Alvarado.- Muchísimas gracias. Calificaría la situación en Nicaragua de preocupante. Preocupante porque ya no sólo han sido los órganos de la OEA, que se han manifestado sobre la situación, sino también ahora se suma la misión de Naciones Unidas, que califica de violaciones sistemáticas de Derechos Humanos. Además, no podemos olvidar que a partir de mayo estamos hablando de más de 400 personas que han fallecido en este tema. Y eso no puede dejar de inquietarnos. Y ahora no podemos inducir una normalidad, como si no hubiere ocurrido nada.
Desde la posición costarricense, la que hemos impulsado, debe ser desde la multilateralidad de los foros internacionales, tanto o principalmente OEA, en el que debe abordarse esta situación, que ha pasado primero una etapa, la que nosotros hemos experimentado en el país, de seguir un flujo migratorio, refugiados, muchos huyendo de esta situación política. Y, obviamente, Costa Rica hará ejercicios, no sólo de su cuerpo legal, sino el que se ha comprometido internacionalmente, y como lo hemos comunicado, pues ese cuerpo legal es el que protege a las personas que han ingresado a Costa Rica en solicitud de refugios y otros.
Está completamente fuera de lugar esta petición del señor Ortega, absolutamente fuera de lugar.
Decir también que hay que proyectar que el hecho de que la situación permanezca en este impase, ya no sólo generará el impacto de quienes se movilizan por la situación política, sino, de no ver una evolución en la situación, eso tendrá un impacto en la economía de Nicaragua y de la Región. Y eso no va a ser bueno para nadie.
Por eso es importante que desde el diálogo, desde la multilateralidad, se profundice y se persuada a que el señor Ortega permita que las Misiones ingresen y se trabajen soluciones en ese sentido.
Presidente.- Gracias por la pregunta.
En relación con Nicaragua, decirle que nosotros vemos con extraordinaria preocupación lo que está ocurriendo en Nicaragua. Nuestro compromiso es no tanto pensar en el régimen, sino en los nicaragüenses. Y, en ese sentido, nuestra voluntad es continuar con la cooperación en Nicaragua, que viene ya desarrollándose durante estas últimas décadas.
Acaba usted de indicar que parece que en esa cooperación hacia Nicaragua hay algunos elementos que puedan, eventualmente, reforzar la capacidad represiva del régimen, y, en consecuencia, lo que vamos a hacer, es la primera noticia que tengo, es dar orden a mi delegación, a la Secretaria de Estado, para que, precisamente si esto ocurriera, que tengo que contrastarlo, pues que, lógicamente, se revise para que no vuelva a suceder.
La única cuestión, que creo que es en términos políticos lo importante, es que el Gobierno de España mantiene su compromiso con la sociedad nicaragüense, y que, por tanto, nosotros no vamos a retirar nuestra cooperación a Nicaragua. Porque creo que el error sería, precisamente, olvidarnos de aquellos que están sufriendo la represión del régimen. Y, por tanto, nosotros vamos a continuar con esa cooperación. Tanto es así, que, también, en otro orden de cosas, al hilo de la reflexión que ha hecho el presidente de Costa Rica, nosotros hemos aumentado nuestra aportación en la OEA. Y lo hemos hecho precisamente porque es precisamente la OEA quien debería y debe liderar el proceso de diálogo que se tiene que abrir en Nicaragua para, de una vez por todas, resolver esta crisis.
Y respecto a Cataluña. Bueno, yo no sé si cada día tenemos una novedad o no. O estamos en lo mismo. Yo creo que hoy la ministra portavoz en el Consejo de Ministros lo ha dicho claramente: hay que dar una oportunidad a la política. Nosotros advertimos, entre otras cosas, porque ya se recorrió ese camino el año pasado, y, por tanto, advertimos, simplemente, de cuáles son las consecuencias de volver al unilateralismo, de volver a la quiebra de la legalidad.
España es un país con un Estado social y democrático de derecho, con una democracia homologable al conjunto de democracias europeas. Y, por tanto, dentro de la Constitución hay un espacio enorme en el que podemos dialogar la Generalitat de Cataluña y el Gobierno de España. Esa es la voluntad del Gobierno de España, dar una oportunidad a la política. Hemos activado las comisiones bilaterales, donde vamos a hablar de las cosas que importan a los catalanes: de la sanidad, de las infraestructuras, de la financiación, de los servicios públicos esenciales. No solamente eso, sino que, además, por supuesto que yo mantendré una reunión a lo largo de este año con el presidente Torra en Barcelona. Y, también, he anunciado que vamos a celebrar, por primera vez, un Consejo de Ministros en Barcelona, donde ahí también estamos, digamos, ejemplificando el compromiso del Gobierno de España con Cataluña y con los catalanes y catalanas.
¿Cuál sería la reflexión que yo le haría? La reflexión que yo le haría al señor Torra es que en Cataluña se tiene que abrir un diálogo entre catalanes. El president Torra lo que está haciendo es dirigirse constante y únicamente a una parte de la sociedad catalana, que es una minoría mayoritaria de la sociedad catalana. Pero no es la mayoría. La mayoría de la sociedad catalana ¿dónde se ubica? Se ubica en el autogobierno. No se ubica en la independencia. Por eso, la propuesta del Gobierno de España es clara, es nítida. La propuesta del Gobierno de España es autogobierno, Constitución y Europa. Y, en torno a esos tres ejes, nosotros estamos dispuestos a dialogar con la Generalitat de Cataluña. Pero lo primero que tiene que hacer la Generalitat de Cataluña es abrir un diálogo entre catalanes.
Cataluña tiene que abrir un diálogo consigo misma. Cataluña tiene que hablar con Cataluña, porque es evidente que existe una crisis de convivencia, y esa es la primera y principal responsabilidad que tiene el president de la Generalitat.
Después, en relación con la Constitución, también les digo, y les hago la reflexión de que este es el año, se lo he dicho antes en la conversación al presidente de la República de Costa Rica, es el año en el que cumplimos el 40 aniversario de la Constitución Española. Y, a partir de septiembre, el Gobierno de España va a desplegar una acción importante de reivindicación de los 40 años de la Constitución Española. De lo que ha supuesto en términos de cohesión social, de cohesión territorial, de unión de los españoles, y de unión de los pueblos de España.
Por tanto, este es un Gobierno que va a reivindicar la Constitución Española, su vigencia. Y dentro del marco constitucional, por supuesto, encontrar la solución a esa crisis política como la de Cataluña.
P.- Alfonso Hernández. Qué tal, buenos días, sus señorías. Gracias por la oportunidad igualmente.
Pensando en la crisis económica que recién vivió España, quisiéramos saber, don Pedro, si usted podría brindarnos las líneas que ha seguido España para ir superándola. Y, a su vez, presidente Alvarado, queríamos saber si en algún momento se ha solicitado algún consejo en esa línea. Lo pregunto en miras al tema de la amenaza del sector sindical de paralizar el país en próximos días, y que, hoy, justo cuando usted llamó al diálogo, lo dejaron plantado. No llegaron los señores de los miembros sindicales. Y piden como condición, por ejemplo, el tema de que se retire el aspecto de canasta básica de la discusión. Queremos saber si tal vez el Gobierno está dispuesto a ceder en esa materia, a raíz también de la descoordinación que se presentó el lunes en la Asamblea Legislativa con las salidas y no salidas del Proyecto de Ley de la legislación.
Muchas gracias, señores.
Presidente.- Bueno, yo, desde luego, consejos, ninguno. Nosotros conversamos, compartimos experiencias, y los Gobiernos, pues, lógicamente, aprenden de esas experiencias.
Si a mí usted me preguntara en una palabra ¿cuál es el proyecto político que yo quiero para mi país? Yo diría, justicia. Justicia. Que mi país sea más justo. Que sea más justo en términos económicos. Que sea más justo en términos sociales. Que sea más justo en términos medioambientales. Que sea más justo en la cuestión de igualdad de género. Yo creo que la justicia es la gran causa que moviliza a las sociedades.
Una sociedad como la española, que ha sufrido los efectos de la crisis, que sufre la desigualdad, que salió mucha gente a la calle al grito de la "dignidad", cuando vio, por ejemplo, que un derecho como el de la vivienda se le negaba, precisamente por la crisis financiera. En realidad todo lo que esconde ese grito de dignidad es una apelación y una demanda de justicia. ¿Qué quiero decir con esto? Que la gran lección, al menos, lo que yo puedo compartir y he compartido con el presidente en esta cuestión es que no se puede crecer sin cohesión y no habrá cohesión sin crecimiento. No se puede crecer sin repartir. Y no se puede repartir sin crecer.
Por tanto, si un país quiere ser más justo socialmente, necesita, también, articular una justicia fiscal. Y este es el desafío y el debate que tenemos nosotros en España.
Nosotros queremos más justicia social, pero para tener más justicia social necesitamos más justicia fiscal. Necesitamos que aquellos que más ganan, más contribuyan, para que tengamos una educación de calidad para nuestros hijos; para que la sanidad sea una sanidad que llegue a todos aquellos familiares que están sufriendo una enfermedad o que la pueden tener; para que haya un derecho garantizado de vivienda; para que se puedan hacer las infraestructuras que necesita un país y se pueda conectar con el mundo; para hacer frente a la digitalización y a la formación de los trabajadores y trabajadoras.
En definitiva, este es el gran debate de las sociedades, la española y de cualquier otra latitud. ¿Queremos sociedades más justas o no? ¿Queremos aspirar a una justicia social, sí o no? Hay proyectos políticos que defienden que la injusticia social es, digamos, una cuestión de derecho natural. Yo, como progresista, me niego a creer en ello.
Yo creo que la sociedades tienen que aspirar siempre a una justicia social y eso implica que, lógicamente, todos tenemos que contribuir con un mínimo esfuerzo, con una justicia fiscal. ¿Cuál es el gran problema que tienen las clases medias en muchas ocasiones, en España, por ejemplo? Que consideran que ellos pagan más impuestos de lo que pagan las clases más pudientes. Ese es el debate. Ese es el debate. El debate es cómo hacer de la justicia fiscal un hecho fundamental para el desarrollo de nuestras sociedades. Y eso es lo que yo he compartido con el presidente sobre esa cuestión.
Sr. Alvarado.- Yo valoro muy positivo el avance en el diálogo que hay en materia fiscal, sobre todo, con las fracciones. También ese mismo diálogo lo hemos lanzado y hemos hecho la invitación al movimiento sindical, que si bien hoy no se concretó en la reunión, creo que eso es un detalle. Lo importante es que la posición del Gobierno de dialogar está ahí, y está abierta. Está la propuesta abierta y yo veo, también, con buenos ojos que el día lunes sea la unión sindical la que determine el futuro de ese avance. Pero de parte del Gobierno, la puerta está abierta para dialogar en esa materia. Y confío que eso se materializará, porque todos queremos una solución en ese campo.
En relación a lo que fue la convocatoria del proyecto, en ese ámbito por lo menos yo me siento muy tranquilo, ¿por qué? Porque corresponde al presidente ser el que convoca o desconvoca extraordinarias, y en mí nunca estuvo el desconvocar o una orden de desconvocar el proyecto. Ahí, hasta los mejores en los campos a veces cometen alguna equivocación entendible, como fue el caso de nuestro jefe de fracción, don Víctor, un gran diputado, que en esto dio una declaración que no fue atinada en el momento.
Pero, ¿qué es lo importante ahí? Lo importante es que hay un avance en el diálogo del proyecto que está cerca de materializarse. Que hay un avance para abrir un diálogo con el sector sindical, como se ha abierto antes con el sector agropecuario, como se ha abierto con otros sectores para llegar a acuerdos.
Y todo mi trabajo está enfocado para dar respuestas a estas preguntas, pero que no llegue a haber una pregunta que sea: ¿y usted hizo lo suficiente para evitar una crisis? Esa es la pregunta por la cual yo lucharé para que no llegue a tener que plantearse. Porque eso es lo que estamos luchando, para que Costa Rica no se vea enfrente de una situación de crisis. Y estamos aún a tiempo, pero hay que tomar esas determinaciones, determinaciones que son complejas. Pero, también, la pregunta es: ¿cuál sería la opción de no adoptar un proyecto como material fiscal? Algo que se ha discutido en Costa Rica por 18 años y no hemos logrado concretar. Pero así como se logró concretar la apertura en materia de triángulo de solidaridad, para que esa ruta se construya o así como se han concretado muchas otras cosas, esta se concretará. Y por el bien de las personas, para que las personas estén mejor. Eso es lo que estamos haciendo. Y lo hacemos, sí, lo hacemos con convicción. Creemos en lo que estamos haciendo. Es para proteger a Costa Rica, también, que hacemos esto.
P.- José Miguel Blanco, de la Agencia EFE. Gracias, buenos días. Para el presidente del Gobierno en relación con la propuesta europea de que no haya un cambio de horario. No sé si usted se decanta más por mantener el horario de verano o el horario de invierno, y si se plantearía realizar algún tipo de consulta al respecto. Y ante la polémica por el sindicato de trabajadoras sexuales, si mantiene intacta la confianza en su ministra de Trabajo, después de que haya reconocido de que le han colado un gol por la escuadra.
Y en términos futbolísticos, si me permite el presidente de Costa Rica, y después de que ayer Kelyor Navas fue proclamado el mejor portero de la Champions, si vería lógico que perdiera la titularidad en el Real Madrid. No sé si el presidente del Gobierno compartirá esa opinión. Gracias.
Presidente.- Bueno, yo respecto a la segunda de sus preguntas, le diré que sí, toda la confianza. Respecto a la primera de las preguntas, bueno, hemos amanecido con el anuncio de la Comisión Europea. Ya se ha pronunciado la ministra portavoz en relación con este asunto. Yo le diré que me parece que es un asunto importante., que necesita de un análisis serio, de un análisis riguroso, y que necesita, también, de un gran consenso. Lo que se vaya a hacer, cuál vaya a ser la posición de España en el asunto de los husos horarios, tiene que exigir y requerir un gran consenso.
Con lo cual, la posición del Gobierno de España es la de constituir un comité de expertos para evaluar la posición. Saber exactamente qué conviene en términos de productividad, de calidad de vida, de bienestar social, de ahorro energético para nuestro país en la cuestión de los husos horarios. Y, en segundo lugar, una vez que conozcamos ese posicionamiento de los expertos, pues, lógicamente, trabar las suficientes complicidades con los actores políticos, los actores sociales, para que, en caso de que haya un eventual cambio, pues cuente con el mayor consenso posible. Esos son los dos ejes, digamos, de la aproximación que hace el Gobierno a esta cuestión: Uno, expertos, asesoramiento, porque creemos que es un tema lo suficientemente importante para que trascienda, digamos, la reflexión política e incorporemos el asesoramiento de expertos. Y la voluntad del Gobierno de llegar en caso, en caso, -subrayo lo de en caso- a un cambio en los horarios, que cuente con un consenso importante en el conjunto del país.
Sr. Alvarado.- Yo no suelo opinar mucho sobre fútbol, pero si me lo consulta, creo que Keylor Navas ha hecho mérito no sólo para ser portero titular en el Real Madrid, sino que ha hecho méritos para ser titular, portero titular, en la Selección del Mundo, porque esos son sus méritos. Yo creo que esa es una buena posición para él y para Costa Rica.
Muchas gracias.
(Transcripción editada por la Secretaría de Estado de Comunicación)