Declaraciones del presidente del Gobierno después de la reunión del Consejo de Ministros extraordinario

P.- Presidente, quería preguntarle si está dispuesto, si sigue dispuesto, a, si el presidente Artur Mas abandona esta vía de la ilegalidad, aceptar las veintitrés propuestas que le vino a traer a Moncloa el pasado mes de julio.

Presidente.- Vamos a ver. Las propuestas que me ha hecho el presidente de la Generalitat algunas son razonables, otras son más discutibles; pero, por lo general, son unas propuestas que están hechas en la línea en que pueden hacerlo los otros presidentes de otras Comunidades Autónomas; es decir, son propuestas que afectan a infraestructuras, en algunas ocasiones propuestas sobre temas de financiación.

Yo sobre eso estoy dispuesto a hablar, pero con el señor Mas y con el presidente de cualquier Comunidad, porque es mi obligación y porque creo que es bueno que hablemos y que dialoguemos, y, si es posible, lleguemos a un entendimiento. De lo que no voy hablar es de violentar la Ley, porque comprenderá usted que eso es lo último que se espera del presidente del Gobierno de cualquier país serio.

P.- En este mismo sentido, ¿va a contestar usted a esas veintitrés propuestas? ¿Hay una propuesta de diálogo? ¿Hay una oferta aquí encima de la mesa de una posible reunión con el señor Mas, algo que se vaya a hacer en los próximos días? En cualquier caso, si no es así, si no se acepta esa propuesta y si Mas sigue con la idea de sacar las urnas a la calle, ¿qué va a pasar? ¿Qué medidas tiene previstas el Gobierno?

Presidente.- Yo al diálogo he estado dispuesto siempre. Siempre que el presidente de la Generalitat ha querido verme lo he recibido, siempre. No ha habido ninguna vez que yo me negara a recibir al presidente de la Generalitat desde que soy presidente del Gobierno. Por tanto, estoy abierto al diálogo, a hablar de esas propuestas o de cualesquiera otras sobre lo que el presidente de la Generalitat quiera.

A partir de ahí, permítame que no entre en escenarios que todavía no se han producido.Yo en este momento no contemplo un escenario distinto del que el señor presidente de la Generalitat cumpla la Ley. Es decir, no quiero contemplar un escenario distinto.

P.- Presidente, cuando dice que aún están a tiempo de enderezar la situación, ¿se refiere a que, si no se sacan las urnas a la calle, se podrán buscar fórmulas de encaje de Cataluña y podría llegarse, incluso, a una modificación de la Constitución pactada?

Presidente.- Cuando digo que estamos a tiempo, lo primero es que, si el Tribunal Constitucional admite a trámite y, por tanto, la Ley y el Decreto sean suspendidos, que se atienda y se cumpla lo que diga el Tribunal Constitucional. Eso es lo primero y, a partir de ahí, podemos hablar de otras cosas.

La reforma de la Constitución es algo que admite nuestro ordenamiento jurídico y, de hecho, ya se ha modificado en dos ocasiones. Lo que pasa es que en este justo momento lo importante es defender la Constitución. Eso es lo prioritario en este momento.

La Constitución es una norma que lleva en vigor, como todo ustedes saben, ya algunos años, desde 1978 y durante el período en que la Constitución ha estado en vigor hemos vivido la mejor etapa de muchas en la historia de España, y, desde luego, de los últimos tiempos. La Constitución garantiza nuestros derechos y garantiza nuestras libertades. Con esa Constitución hemos entrado en Europa, hemos progresado como nunca en nuestra historia y con esa Constitución la Generalitat de Cataluña tiene las mayores competencias de toda su historia.

Por tanto, lo primero es defender la Constitución. A partir de ahí, se puede reformar; ya se ha reformado en algunas ocasiones. Hay quien incluso lo plantea. Pero lo prioritario hoy es defenderla y, luego, ya hablaremos en el futuro.

Por tanto, yo sigo abierto al diálogo, como siempre. Lo que no puedo aceptar es que se hagan cosas vulnerando la Ley, porque para eso soy el presidente del Gobierno.

Señoras y señores, muchas gracias.