P.- Vicepresidenta, yo quería preguntarle por dos asuntos. El primero, el drama de los refugiados, porque se han ido tomando medidas en Europa que parece que no están teniendo el impacto deseado. Me gustaría saber si el Gobierno apoya un plan integral para este tipo de drama y si el presidente del Gobierno, en el próximo viaje que va a realizar a Alemania, le va a proponer algo de este estilo a la señora Merkel.
En segundo lugar, quería preguntarle por los registros que están teniendo lugar hoy a Convergència Democrática de Catalunya, porque ellos mismos denuncian que es una operación política.
Vicepresidenta.- Sobre la primera de las cuestiones, es una trayectoria muy consolidada de España, de sus distintos Gobiernos, ya desde principios de los años 2000 reclamar una política integral a la Unión Europea en materia de inmigración y en materia de asilo. Siempre hemos considerado que éste es uno de los temas cruciales en los que tenemos que hacer una verdadera política común en el seno de la Unión, siendo muy conscientes, además, de que determinados Estados, entre los que se encuentra España, tienen una experiencia en el control de gestión de fronteras y una experiencia en el ámbito de la gestión de la inmigración, y cada vez más en el ámbito del asilo, por lo que diré que nos sirve para prestar esa experiencia en el conjunto de la Unión.
Nosotros consideramos que la gestión de la inmigración y también del asilo, aun cuando son dos aspectos diferentes pero que, indudablemente, van muy ligados y a veces no es posible distinguir en su gestión, pasa por una serie de elementos fundamentales: en primer lugar, por un respeto a la legalidad en la gestión de estos flujos; en segundo lugar, por la búsqueda de la mayor integración posible a la hora de gestionar estos fenómenos; en tercer lugar, por una lucha contra las mafias de la inmigración irregular, que además ahora se han extendido al asilo, porque al final se aprovechan de este drama y de estas tragedias humanas para hacer negocio o para abrir nuevas rutas para generar los dramas que estamos viendo; y, por último, un aspecto muy importante, y es la solución en origen, a lo que aquí se añade un componente mucho más difícil de gestionar como son la guerra y el terrorismo internacional, terrorismo yihadista, que estamos viviendo.
España ha sufrido crisis humanitarias a lo largo de estos últimos años, tanto en gobiernos del Partido Popular como en gobiernos socialistas, muy amplias. Ahí hemos adquirido una experiencia muy importante porque, al final, la colaboración y la cooperación en origen, los acuerdos de tercera generación que llevamos a partir del año 2002 con distintos estados; esa inversión que te permite dar una solución en origen a la población es, al final, lo que tenemos que trabajar y es lo que nos gustaría que se hiciera en el seno de la Unión Europea.
En las últimas discusiones, junto con el plan de refugiados donde se acordaron esas cuotas, nosotros sí pusimos de manifiesto que ésas son soluciones coyunturales y puntuales,, y que tanto la gestión de la inmigración, como la gestión del asilo --España cada vez más recibe un número más amplio de solicitantes de asilo y ha crecido mucho en estos últimos meses--, necesita una solución estable a medio y largo plazo. Va por una solución en origen, tanto en el ámbito de la lucha contra el terrorismo y en los Estados de donde estamos viendo que tienen que salir todas esas personas en las condiciones que salen, como en el ámbito de la inmigración, donde es muy importante trabajar con los países de origen y con los países de tránsito para poder invertir allí, para que nuestra cooperación al desarrollo sea una manera de darle un futuro a esa población que quiere salir de allí porque no tiene otros medios de vida y para buscar e implicar a las autoridades locales y a las autoridades de esos Estados en el control y en la gestión de sus flujos, también prestándoles la propia asistencia española o, en su caso, la Unión Europea.
Esta es nuestra posición sobre este tema. Quiero decir que en estos debates España siempre es un país al que se escucha, porque tenemos una experiencia en materia de inmigración y también la tenemos en el ámbito del asilo. Tenemos una frontera sur, una frontera muy amplia. Con estas medidas, y lo digo claramente, tanto este Gobierno como el anterior y como el anterior, ya el Partido Popular ha puesto fin a determinadas venidas masivas que generan mucho riesgo para las personas. Quiero recordar, por ejemplo, los cayucos en Canarias, etc. Fue una gestión muy complicada pero, sobre todo, muy dramática porque mucha gente naufragaba en nuestras costas como estamos viendo, y con determinados países hemos logrado crear un clima de colaboración muy importante.
Por eso, nosotros siempre vamos a demandar, y ésa ha sido nuestra posición y lo seguirá siendo, una gestión integral, una verdadera política europea que colabore en el corto plazo para los problemas que está teniendo esa población que tiene que salir de esos Estados, siendo muy consciente de las dificultades del origen de esos movimientos, pero también a medio y a largo plazo, porque esto es uno de los grandes retos a los que se enfrenta la Unión Europea.
Lo venimos diciendo puedo decirle que desde finales de los años 90. Este asunto es uno de los retos más difíciles y más complicados que tiene la Unión, y que tenemos que solucionar entre todos porque, como estamos viendo, al final las fronteras en cada temporada, y según los flujos y las rutas que hagan las mafias, les acaba afectando a unos y otros, y tenemos que solventarlo y solucionarlo de una manera común, de una manera integral, de una manera solidaria. España también ha demostrado su solidaridad pero, sobre todo, su experiencia porque, por desgracia, en España la tenemos y, por fortuna, en algunos elementos hemos acertado los distintos Gobiernos que nos ha tocado gestionarlo.
Sobre el segundo de los puntos, yo pediría a todo el mundo lo que digo siempre en esta mesa: que se respeten las decisiones judiciales. Aquí hay una actuación judicializada por un juez --no recuerdo el número, creo que es el número 1-- de los Juzgados de Vendrell, en Tarragona. Esto es una actuación judicializada. Yo les pediría a los líderes de Convergència y de la Generalitat que no busquen culpables fuera de sus filas, que será donde haya que demostrar que los hay o que no los hay. Y, como están ahí las hemerotecas y como a mí me ha tocado en estos viernes con todos ustedes hablar de muchos temas, creo que a lo largo de estos meses y años si una cosa ha quedado clara es que las actuaciones de lucha contra la corrupción y de las instituciones que luchan contra la corrupción no entienden ni de partidos -incluido el del Gobierno--, ni de fechas electorales. Con lo que les pediría que fueran más respetuosos con las decisiones judiciales y que no busquen culpables fuera de sus filas; que se preocupen más de qué pasa dentro de ellas.
P.- Quería preguntarle, en primer lugar, por los Presupuestos Generales del Estado, porque el Gobierno ha permitido, con la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado, que los dos grandes partidos que tienen posibilidades de gobernar en la próxima Legislatura se retraten. El Gobierno ha apostado por una subida del sueldo de los funcionarios del 1 por 100 y de las pensiones de un 0,25 por 100; pero el PSOE publicó ayer sus enmiendas y parece que quiere adelantar al Gobierno por la izquierda y ha propuesto una subida del sueldo de los funcionarios del 1,5 por 100, de las pensiones del 1 por 100 y de las pensiones mínimas del 2 por 100, además de una renta mínima vital.
Me gustaría saber si el Gobierno considera que estas propuestas del PSOE son viables en este momento para la economía española, por qué no las asume el PP si la recuperación permitiera que estos sacrificios que han sufrido estos grupos de población pudieran ser compensados de esta manera y, después, si cree que este tipo de propuestas demuestran una "podemización", a lo mejor, del PSOE o no.
En segundo lugar, me gustaría saber si el Gobierno que ha planteado la reforma de la Constitución, pues el presidente del Gobierno sugirió que está abierto para que en la próxima legislatura se pueda hacer, aunque parece que se ha cambiado de opinión, ¿estaría dispuesto a aceptar la singularidad de Cataluña en la Constitución a cambio de que se enterrara el desafío soberanista? El Partido Socialista ha dicho que ésa puede ser una vía. ¿Para el Gobierno es una línea roja?
Vicepresidenta.- A la primera de sus preguntas, nosotros, presentando y aprobando, y después con la aprobación en las Cortes de estos Presupuestos Generales del Estado, lo que seguimos haciendo es la política económica que en este país ha permitido consolidar la recuperación y crear empleo, y que ha permitido, por ejemplo, cifras como las que vimos ayer. Eso no lo vamos a cambiar, entre otras cosas, porque este país tiene un objetivo esencial que es crear empleo, y para crear empleo tenemos que conseguir crear riqueza y lograr repartirla entre todos. En este Presupuesto no es lo mismo la situación en la que nos encontramos el país en el año 2011, con treinta mil millones de déficit oculto y al borde del rescate, que la situación en la que nos hemos encontrado después de que hemos transformado todas las cifras negativas de crecimiento en cifras positivas.
Esto ha permitido incrementar la recaudación, pero todavía seguimos teniendo unos objetivos de déficit que hay que cumplir. Yo lo que le preguntaría al Partido Socialista es si ellos están comprometidos con esos objetivos de déficit, si ellos saben que los objetivos de déficit que marca el conjunto de la Unión Europea hay que cumplirlos, porque esto ya son palabras concretas de las que empezar a hablar.
Dentro de ese margen que nos permitía la misma política económica del cumplimiento de los objetivos de déficit presupuestario, pero también dentro del margen que nos daba el crecimiento económico --no nos engañemos: si se pueden hacer determinado tipo de políticas es porque España ha vuelto a crecer y ha vuelto a recaudar; ésa es la clave, si no, pan para hoy y hambre para mañana si no consolidamos la recuperación--, hemos podido hacer algunos esfuerzos.
A los funcionarios públicos, a los empleados públicos, se nos recortó el sueldo en el año 2010 por tramos según los sueldos; pero se nos recortó los sueldos y luego se congeló ese recorte. Fueron épocas de austeridad. Este año hemos podido, por primera vez, aplicar una subida de ese sueldo. Ya nos hubiera gustado a nosotros todavía más, pero tenemos que ir mejorando esa recuperación para poder hacerlo. Pero, desde luego, a los funcionarios hay que reconocerles el esfuerzo que han hecho a lo largo de toda la crisis y hay que empezar a volver a recuperar eso que perdieron en el año 2010. También ya se ha recuperado parte de la paga extra que se suprimió y seguiremos trabajando para recuperar las otras partes o los días de libre disposición. Creemos que si un colectivo ha hecho un esfuerzo muy extraordinario en esta crisis son los funcionarios y, en la medida en que racionalmente nos lo permitan nuestras cuentas, ahí se va a hacer, y se ha hecho, y se ha hecho en esa cifra del 1 por 100 y alguna otra medida que también ayudará.
Sobre las pensiones, yo creo que el Partido Socialista no puede soplar y sorber al mismo tiempo, aunque lo intenta muchas veces. Hablar del debate de la sostenibilidad de nuestras pensiones en nuestro país es saltarse la Ley, porque hay una ley sobre sostenibilidad de las pensiones que determina cuáles son las cifras de actualización de estas pensiones. Los pensionistas han ganado poder adquisitivo en estos últimos años. ¿Por qué? Porque, a diferencia del Gobierno anterior, este Gobierno nunca ha congelado las pensiones y las ha ido actualizando con arreglo a esta propia Ley. Ello, unido a que la inflación no estaba en más del 3 por 100, como estuvo en el año 2010 o en el año 2011, sino una inflación muy contenida y en algunos años inexistente, ha permitido esa actualización.
Por tanto, yo les pediría al Partido Socialista un poquito más de racionalidad y, sobre todo, que no caigan en los mismos errores. Estos errores fueron los que nos llevaron a la situación de casi rescate de la economía española, por un lado, y a un recorte como el del año 2010 inédito en funcionarios y en pensiones que, por mucho que presenten estas enmiendas, no los van a solventar.
Y una última cuestión que he leído, y aunque no me lo pregunta, sí me gustaría poner en claro. El tipo medio, el tramo… Voy a hablar del IRPF porque he leído unas declaraciones del Partido Socialista y, como las cifras cantan, permítanme simplemente esto. Dicen: "hay que subir el tipo sobre las rentas del trabajo más elevadas". Lo dice muy bien su rectificación, porque el tipo medio en el año 2011, o sea, el tipo medio que aplicaba el Partido Socialista a las rentas más altas, 150.000 euros, era del 36,88 por 100. Tras las rebajas de impuestos del Partido Popular, el tipo medio es superior a ése, el 37,49 por 100. Es decir, que lo que están pidiendo es que se suba respecto de lo que ellos hicieron porque este Gobierno ha bajado las tarifas, los tipos medios, a todas las rentas menos a las superiores a 100.000 euros que pagaban 33,48 por 100 y ahora 33,64 por 100. Es para completar, porque también forma parte de ese debate de Presupuestos.
Y sobre el último de los puntos, hemos hablado mucho de la reforma de la Constitución en esta sala y lo que hemos venido diciendo y ha venido diciendo el presidente del Gobierno es lo que se mantiene. Indudablemente, pueden hacerse reformas de la Constitución. De hecho, en el año 2011 por estas fechas hicimos una reforma del artículo 135 de la Constitución con un calado también en el ámbito estatutario, en el ámbito de organización del Estado de las Autonomías bastante importante.
Pero para hacer una reforma de la Constitución se necesita una serie de cosas: en primer lugar, tener muy claro el objetivo y el consenso que tienes para lograr ese objetivo y, sinceramente, y yo he leído en estas fechas a insignes constitucionalistas de nuestro país, ese consenso es muy complejo y creo que uno, al final, tiene que trabajar mucho y puede analizar muchas cosas, y se debe hacer, porque en política hay que analizar todos los escenarios; pero también uno tiene que ser muy realista y, siendo realista, por lo que hemos visto en esta Legislatura, el consenso en el objeto de la reforma de la Constitución no existe y, es más, es muy dispar.
En segundo lugar, a nuestro juicio, una reforma de la Constitución debería de ser para que nuestro Estado fuera más eficaz, mucho más eficiente, resolver mucho mejor los problemas de los ciudadanos, no para buscar determinadas soluciones puntuales. Sobre esto, el presidente del Gobierno, además, ha sido muy claro desde el primer momento. Ya ha dicho el Partido Popular que la reforma de la Constitución no va a ir en su programa electoral, no va a ir.
Somos muy conscientes de que, indudablemente, hay determinados aspectos en los que nuestra Constitución es susceptible de ser abordada, y también lo dijo el Consejo de Estado en su día. Pero esa reforma no va a ir porque también somos muy realistas y porque entendemos que, además de la reforma de la Constitución, hay otros elementos que sí van a formar parte de la próxima Legislatura y que tienen un calado sobre el Estado de las Autonomías y sobre el Estado de Bienestar, no voy a decir tan importante, pero sí muy importante, respecto de nuestra organización territorial y como Estado, y de los servicios públicos que prestamos a los ciudadanos: es la reforma de la financiación autonómica, que hay un compromiso de hacerse por parte del Gobierno y que une los dos debates, el territorial pero el de calado que les importa a los ciudadanos que es el debate de cómo se prestan y cómo se sufragan los servicios públicos y un debate sobre la estructura de los ingresos, ingresos y gastos.
Nosotros hemos hecho una reforma fiscal y hemos adelantado una reforma fiscal en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas para devolver a los españoles parte de los esfuerzos que hicieron durante la crisis. En la siguiente Legislatura tiene que ser una reforma fiscal completa que, ya en otra dinámica de crecimiento, si se mantiene esta senda de recuperación, manteniendo las reformas y manteniendo la estabilidad, nos permita definir una estructura de ingresos que permita mantener una estructura de gastos que es la cara A y la cara B de la financiación autonómica. Y ese debate también es de un gran calado.
P.- Vicepresidenta, sobre los registros quería preguntarle si el Gobierno tiene previsto abrir alguna investigación por la filtración a los medios de comunicación anteriormente por parte de las Fuerzas de Seguridad de esos registros y si tiene algún comentario que hacer ante acusaciones que se han hecho de que se utilicen o haya un abuso de las instituciones democráticas.
Vicepresidenta.- A lo largo de estos meses y de estos años investigaciones de esta naturaleza han trascendido de una u otra manera. Incluso ha habido alguna vez algún debate sobre las filtraciones en relación con los sumarios que hemos tenido que aclarar en el sentido de que nosotros no vamos a poner ningún tipo de límites a esa información. Como comprenderá, seguimos manteniendo respecto a este caso lo que hemos mantenido respecto de otros y, ya le digo, el problema aquí es que, cuando le toca a uno, intenta buscar culpables fuera; pero es que da la casualidad de que casos como éste, por desgracia, han afectado a todas las formaciones políticas, con independencia de la fecha. Por lo que pueden abrir un debate sobre todo esto, pero el debate que al final le preocupa a la ciudadanía es la lucha contra la corrupción.
Por favor, dejemos trabajar a los Tribunales, a la Fiscalía, a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, a todos ésos que, cuando no hay una investigación, esos mismos partidos nos piden que demos medios para que investiguen. Pues están investigando, que es lo que corresponde.
P.- A raíz de la contestación a la pregunta sobre la reforma constitucional, me gustaría preguntarle si el Gobierno considera que hay un problema territorial en España y, en concreto, con el encaje de Cataluña en España.
Por otro lado, me gustaría saber si el Gobierno teme que Convergència vaya a utilizar el victimismo a raíz de esta investigación y de los registros que se han producido.
Ya sobre el tema de los refugiados, ¿hasta dónde pueden el Gobierno de España o la Unión Europea implicarse en el caso de los refugiados en los países de origen, haciendo qué? Por otro lado, y lo que más prisa corre, ¿y con los que están llegando qué está dispuesto a hacer España con ellos?
Vicepresidenta.- Sobre el primero de los asuntos, es muy difícil de contentar a quien nunca parece estar dispuesto a hacerlo y, como ya dijo en su día, hace escasas semanas, el presidente del Gobierno, no se trata de enfoques de reforma para contentar a los independentistas, que sabemos que están en otra dinámica. Yo creo que lo que tenemos que trabajar en España es por un Estado y unas Administraciones Públicas que mantengan nuestro Estado de Bienestar y que sean eficaces al servicio de los ciudadanos.
Yo creo que en este punto, al final, han sido esos Gobiernos eficaces y eficientes los que se han dedicado a solventar los problemas reales en esas Comunidades Autónomas o en esa Comunidad Autónoma que no han sabido solventar con las competencias que tienen y, sin embargo, piden más.
Sobre el segundo de los elementos, a veces en estos partidos se practica lo de la mejor defensa es un buen ataque pero, cuando un asunto está judicializado, esa expresión no sirve. En su caso, que ejerzan la defensa ante los Tribunales con sus abogados; pero no sirve. Además, el victimismo que siempre se practica… Hay determinados dirigentes en la Generalitat o en Convergència i Unió, más concretamente, para los que siempre la culpa la tienen otros. Eso, o es que uno se considera absolutamente responsable de todo, o que no quiere asumir responsabilidad de nada.
Los problemas que puede tener una administración son de la culpa del Gobierno central, esto es el pan nuestro de cada día, es el victimismo respecto del conjunto de los españoles, cuando cada dos años se han convocado unas elecciones, lo cual demuestra que se tiene poco margen de actuación, y ahora la responsabilidad de esto ¿de quién es? ¿De los que investigan? Hemos visto tanto a lo largo de estos meses y a lo largo de estos años de casos de investigación que han afectado a todas las fuerzas políticas del arco parlamentario que, sencillamente, el precedente no les ayuda en absoluto.
Sobre la tercera de la cuestiones, se lo decía a su compañera: es que en determinados Estados hay un problema bélico de origen que hay que solventar y que no es fácil. Lo dejaremos como está, por ejemplo, en el tema libio en el que, además, se mezclan distintas cuestiones, porque en el tema libio se mezcla la situación política en la que vive, de muy difícil gestión, con, además, las nuevas rutas que utilizan los traficantes de seres humanos en África. Una vez que están cerradas las de la costa oeste, utilizan su situación de inestabilidad política. Claro que la situación es muy difícil de solventar.
Igual ocurre en el caso de Siria; es decir, el terrorismo yihadista, el escenario que estamos viviendo es de muy difícil solución, pero a ello se añade que es utilizado por las mafias para abrir nuevas rutas y para….
Entonces, hay que buscar soluciones en distintos ámbitos; pero lo que demuestra o se demuestra que es siempre insuficiente es no tener una estrategia en el medio y en el largo plazo. Eso lo hemos venido defendiendo desde que se planteó el asunto de la gestión de los asilados que salían de Libia diciendo "esto son soluciones coyunturales que pueden solventar este problema". Pero ése era desde el principio de la primavera y del verano; ahora tenemos en otro ámbito. Es decir, hay que hacer una estrategia mucho más detallada y mucho más meditada. Al final, los problemas ahí existen y a los Estados que son frontera también hay que prestarles un apoyo y una ayuda para la que tienen también la solidaridad española porque, por desgracia, de este asunto conocemos, y bastante.
P.- Vicepresidenta, ahondando un poco en lo que ha respondido antes sobre el IRPF y los tipos nominales y reales que se están aplicando, los socialistas en sus enmiendas lo que dicen es que ellos podrían conseguir once mil millones de euros de sobre ingresos por ese procedimiento y también por un nuevo impuesto sobre las grandes fortunas que no han especificado exactamente en qué consistiría. Me gustaría saber si pudiera glosar estas propuestas.
También en materia de presupuestos, se ha pactado a última hora una enmienda Partido Popular-UPN, con tres millones para apoyar la maternidad y para embarazos no deseados. ¿Podría decir cómo se va a distribuir esa cantidad? ¿Quiénes van a ser los beneficiarios?
Una cuestión más, simplemente para aclarar algo que no he entendido bien. ¿En ese Real Decreto un código de conducta para la Casa Real, me ha parecido entender? Insisto en que no lo he entendido bien. ¿Me lo puede aclarar?
Vicepresidenta.- Sí, ahora mismo.
Me preguntaba por el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas. Para que la recaudación funcione como pretende el Partido Socialista hay una base previa que es que la economía funcione, que la gente tenga empleo y que la gente pueda cotizar a la Seguridad Social y pagar su Impuesto sobre la Renta a las Personas Físicas, con lo que lo de las cifras… Esa es mi cuarentena.
Sobre el impuesto de las grandes fortunas no sé lo que están pensando; pero le recuerdo que fueron los que suprimieron el Impuesto sobre el Patrimonio poco tiempo antes de tener la mayor debacle económica que tenía este país. Entonces, yo creo que más vale que se organicen.
¿En qué estamos nosotros? En bajar el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas. Han bajado más los tramos más bajos de renta en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas. Yo he mostrado aquí, con los tipos medios sobre rendimientos netos, que han bajado en toda la escala hasta los cien mil euros de rendimientos íntegros de trabajo. Por encima de los cien mil euros se paga ahora un tipo medio superior al que se pagaba en el año 2011. Y ésta es la línea en la que va a seguir trabajando el Gobierno en el tiempo que resta.
Sobre las enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado, permítame que, más allá de las tareas que tiene el Gobierno en esas enmiendas, deba respetar al Grupo Parlamentario Popular que es quien deberá explicárselas: pero, según yo recuerdo, es un compromiso asumido en ese debate parlamentario y los compromisos se cumplen, y éste se ha cumplido.
Y sobre el código de conducta, y se lo leo textualmente para evitar que yo también me equivoque, lo que se establece es la posibilidad de que se pueda aprobar un código de conducta del personal al servicio de la Casa y que se publique en la página web. Es decir, lo que se abre es la posibilidad de que se pueda aprobar un código de conducta para su personal y hacerse público. Hay que tener presente que la Casa tiene unas particularidades de organización que derivan de nuestra propia Constitución, donde se establece que le corresponde a S.M el Rey organizar su propia Casa. Lo aprueba el Consejo de Ministros a propuesta de Presidencia del Gobierno, porque ésa es la fórmula jurídica que tiene; pero estas medidas tienen su origen en quien le corresponde la propia organización de su casa que, con arreglo a nuestra Constitución, es S.M el Rey.
Muchas gracias.