Sra. Pastor.- Paso a presentarles el Proyecto de Ley del Sector Ferroviario.
Si me permiten, unos primeros datos de la importancia de la norma y del ámbito de aplicación son que la red ferroviaria de interés general del Estado tiene una longitud de más de quince mil kilómetros, de los cuales más de tres mil son de Alta Velocidad. Del año 2012 al año 2015 se han destinado al ferrocarril casi 22.400 millones de euros de recursos presupuestarios del Estado. El sector del ferrocarril genera cincuenta mil puestos de trabajo directos y unos casi cuatrocientos mil indirectos. Existen en España en este momento veintisiete empresas con licencia de empresa ferroviaria para operar, además de la empresa pública Renfe.
En 2014 la empresa pública Renfe transportó 468 millones de viajeros y 21,3 millones de toneladas de mercancías. 438 millones de viajeros tienen asegurada su movilidad a través de lo que se conocen como obligaciones de servicio público que financia el Estado. Y los servicios comerciales han aumentado en este período el número de viajeros un 32 por 100.
Entre 2012 y 2014 hemos pasado de que Alta Velocidad-Larga Distancia la utilicen 22,5 millones a que la utilicen ya 29,6 millones. Y el tráfico de mercancías también se ha incrementado un 25 por 100 entre 2012 y 2014: a 21,3 millones hemos llegado de los 17 millones con que partíamos. Y también el tráfico ferroviario de puertos, que fue casi de 13,4 millones en 2014, un 9,5 por 100 más que el año anterior.
En España la regulación del sector ferroviario estaba en una ley, la Ley 39/2003, que ha quedado a todas luces ya desfasada en muchos de sus aspectos. Además, en la legislación comunitaria se ha aprobado lo que se llama la Directiva Recast, que refunde todas las directivas ferroviarias de la Unión Europea; fundamentalmente, los tres paquetes ferroviarios.
¿Cuáles son los objetivos de la Ley? Son compartidos yo creo que por todos: establecer un nuevo marco jurídico que permita seguir desarrollando un modelo ferroviario de la máxima calidad y que, además, es una referencia en nuestro país y en todo el mundo por el alto nivel de la ingeniería española, de la operación española y de la fabricación de trenes en nuestro país, conseguir un incremento de la oferta ferroviaria, lo que se va a traducir en más calidad y más accesibilidad de los servicios; reforzar los mecanismos relativos a la seguridad ferroviaria, y saben que se pone en marcha el día 1 de abril la nueva Agencia de Seguridad Ferroviaria; y trasponer al Derecho español toda la normativa comunitaria.
En materia de las infraestructuras, lo que hacemos es reforzar los mecanismos para que haya una planificación rigurosa. Hay tres instrumentos nuevos en la Ley de obligado cumplimiento, que son, por un lado, la Estrategia Indicativa, que corresponde al Gobierno, al Ministerio de Fomento, como el instrumento de planificación de todas las infraestructuras; una segunda área, que es el programa de actividad, en el que corresponde a los administradores de infraestructuras, a ADIF, la estrategia indicativa, que es la previsión orientativa de qué se va a hacer en los próximos cinco años; y un convenio entre ADIF y el Ministerio de Fomento que establezca los objetivos en todos los términos: de extensión de red, de calidad, de mejora del servicio, etcétera.
La nueva Ley prevé un nuevo sistema de cánones. El canon, como saben, es lo que ha de pagar quien transita por una vía, fundamentalmente porque esa vía ha costado dinero, nos ha costado dinero a todos, y, por lo tanto, hay que pagar por ir por las vías.
Se crea un nuevo sistema de cánones cuyo objetivo es incrementar el uso de las excelentes infraestructuras españolas. Se elimina lo que, a nuestro juicio, era una barrera de entrada, que era que había un canon de acceso, suprimiendo este canon de acceso; es decir, se pagaba por entrar, operaras más trenes o no los operaras. Se crea un nuevo canon de utilización de energía eléctrica de tracción y de zonas de carga y descarga. Ahí tienen, sobre todo para los que son de esta área, la estructura de cánones, la actual, frente a la nueva estructura, que es mucho más racional y genera mucha más competencia con el canon por adjudicación de capacidad.
También se introducen algunas variables de bonificaciones para que quien haga más actividad pueda tener un mayor retorno; es decir, tratar por igual a todos pero incentivar el aumento --estoy hablando especialmente del transporte de mercancías--, para que España, como estamos haciendo un esfuerzo, como saben, muy importante de adaptar nuestras vías al ancho europeo… Saben que España tiene un ancho de vía, que es el ancho ibérico, que es un poco más ancho que el europeo. Y, por ejemplo, el Corredor Mediterráneo se está transformando entero para que puedan ir trenes de mercancías, que se suba la carga en Valencia, por ejemplo, y que pueda llegar al centro de Europa.
En el transporte de mercancías se incluyen medidas liberalizadoras de los servicios que se prestan en las terminales ferroviarias públicas; se imponen nuevas condiciones de transparencia para la actuación de los administradores; se simplifican el régimen tarifario y las autorizaciones, y se impulsa el papel de los puertos como administradores de infraestructuras ferroviarias. Saben que hay parte de las infraestructuras ferroviarias que están dentro de los puertos y lo que se introduce también es mayor flexibilidad.
En los servicios de transporte de viajeros, los operadores ferroviarios aportarán al Ministerio de Fomento información de la actividad e información contable; como ya lo están haciendo, por cierto, ahora, por ejemplo, las compañías aéreas, que tienen obligación de aportarnos periódicamente toda la información contable y de actividad. Y las empresas deberán llevar cuentas separadas: en quienes administren o lleven a cabo servicios de mercancías y de viajeros, esas cuentas tienen que estar, y con cuenta de resultado separada.
En materia de seguridad, hay un capítulo extenso con la creación de la nueva Agencia de Seguridad, que es independiente de los administradores de infraestructuras, empresas ferroviarias o entidad adjudicadora, a la que nunca la Agencia de Seguridad Ferroviaria podrá encargar informes a quien sea miembro o que conforme el administrador de infraestructuras, como por otro lado parece razonable.
En cuanto al régimen sancionador, se refuerzan las sanciones por vulnerar los derechos de los pasajeros y aspectos relacionados con la seguridad.
La tramitación de esta norma, que tiene mucha relevancia, no solamente en los ciudadanos, que son los más importantes, sino en todos los sectores, se somete a audiencia pública, a partir de la aprobación de hoy, a todos los actores del sector: a empresas ferroviarias, a asociaciones, a la CNMC, etcétera. Y después de estudiar las alegaciones, se producirá la remisión al Consejo de Estado y la elevaremos de nuevo a Consejo de Ministros para segunda lectura. La idea es que en el mes de abril se pueda llevar a segunda lectura, si todo va bien, para su tramitación en las Cortes Generales.
Y con respecto al asunto que señaló ya la señora Vicepresidenta del túnel que comunica Chamartín con Atocha y la extensión de vías a Torrejón de Velasco, la autorización que hace ya el Consejo de Ministros es para que podamos ya licitar la infraestructura que queda pendiente en el túnel, que es importantísimo, como saben, sobre todo ahora que estamos extendiendo también la Alta Velocidad a muchas más ciudades y pueblos de España. Es para que haya una conexión directa entre Atocha y Chamartín. Se van a beneficiar todos los ciudadanos con que haya esa conexión directa entre las líneas que van a un lugar de España y las que van a otro, como pueden imaginar, y que haya conexiones directas; que alguien pueda ir desde León a Cataluña, por ejemplo.
Éste es un esfuerzo que se está haciendo para culminar esta línea, que para nosotros es muy importante: por la duplicación, prácticamente triplicación, de vías en Torrejón de Velasco, que saben que es la gran salida de Madrid, línea por la que sale un volumen muy importante de trenes, y por operatividad. Dado que vamos a aumentar en estos próximos meses casi mil kilómetros más de Alta Velocidad, es muy importante que pueda haber operatividad total de los servicios ferroviarios, no sólo de Alta, sino también de Cercanías y de toda la red.