Intervención de Miquel Iceta

Me corresponde presentarles la aprobación por parte del Consejo de Ministros de la nueva Ley del Deporte.

Realmente lo que hace es actualizar la ley vigente, que es de 1990. Estamos hablando de hace 31 años. Para que se hagan una idea, la ley del 90 sustituyó la ley del 80, entonces fueron 10 años, ahora han sido 31, y en ese período lo que se ha producido es un cambio muy importante en el deporte en nuestro país, mucho más desarrollado, mucho más profesionalizado.

Y el Gobierno lo que trata es de dar seguridad jurídica a la práctica deportiva, empezando por reconocer un nuevo derecho de ciudadanía, que es el del derecho a la actividad física y al deporte.

Lo que se trata es de que los poderes públicos garanticen la libre práctica deportiva sin discriminación y en condiciones de seguridad.

Uno de los ejes fundamentales de esta ley es precisamente el de la igualdad. Hemos introducido todos aquellos elementos que la sociedad española ya ha hecho suyos en materia de igualdad entre los sexos y también el reconocimiento del derecho a la no discriminación del colectivo formado por las personas LGTBI y también de las personas con discapacidad.

Hemos intentado recoger en la ley la diversidad de la práctica deportiva, la de los profesionales y los que no lo son, la de los deportistas de alto nivel y alto rendimiento, y también los derechos y las posibilidades que han de tener los deportistas ocasionales.

Se habla en la Ley del voluntariado deportivo, del deporte universitario, del deporte en edad escolar y por lo tanto, no hemos dejado sector sin trabajar.

He de decirles que ese esfuerzo ha sido posible porque teníamos mucho trabajo hecho y las aportaciones de mucha gente. La elaboración de este proyecto ha recaído sobre el Consejo Superior de Deportes, pero para ello ha contado con la aportación de los ministerios, 16, que han hecho aportaciones concretas para evitar vacíos y algunos errores y algunas disfunciones, pero también con las comunidades autónomas, con las federaciones deportivas, y con todos aquellos que han querido participar a través de los procedimientos de audiencia pública.

Nosotros lo que pretendemos con esta ley es dotar al deporte español de las máximas oportunidades, de las máximas posibilidades desde la seguridad jurídica y haciendo valer esos criterios de igualdad y no discriminación.

Concretamente, y se nota en el proyecto, hay un interés en reconocer y promover la práctica deportiva de las mujeres y protegerlas ante los intentos de algunos de vulnerar sus derechos. Va a haber una obligación de presentar informes sobre igualdad, porque queremos que las mujeres no solo tengan el mayor de los estímulos para practicar deporte, sino también asegurar su presencia en todos los organismos, una presencia lo más paritaria posible. Y queremos también que todos los organismos deportivos, a todos los niveles, tengan protocolos en materia de prevención y actuación para situaciones de discriminación, abuso y acoso sexual.

Es una ley que también lo que intenta es impulsar al deporte español en la vía de la inclusión. Saben ustedes que hay algunas federaciones deportivas internacionales han iniciado un camino para incorporar en ellas a las personas con discapacidad y por lo tanto, ir cada vez más reduciendo esa doble estructura deportiva en función de la diversa capacidad de las personas.

Hemos intentado recoger lo que es hoy el deporte y darle una perspectiva de futuro.

Sin duda, el gran objetivo de la ley es que siga creciendo la práctica deportiva, pues entendemos que el deporte es una contribución imprescindible para la salud, para la cohesión y también para el cambio de los hábitos de vida de la ciudadanía.

El deporte también es cohesión y también es orgullo de país y, por lo tanto, en la ley se recoge también el estímulo, el apoyo a la presencia en competiciones deportivas internacionales de nuestros deportistas y nuestras deportistas y se recoge como no podía ser de otra manera también, cuál ha de ser el papel del Comité Olímpico Español a este respecto.

Me pondré a su disposición cuando así lo diga la ministra portavoz para hablar de estos temas.