Intervención del presidente del Gobierno en el acto de colocación de la primera piedra de la gigafactoría de baterías de litio de Envision AESC

Teatro del Mercado, Navalmoral de la Mata (Cáceres)

INTERVENCIÓN DEL PRESIDENTE DEL GOBIERNO

Buenos días, presidenta de la Junta de Extremadura, ministro, consejero delegado y fundador de Envisión, Lei Zhang, consejero delegado de AESC Europa y Estados Unidos, alcalde de Navalmoral de la Mata, delegado del Gobierno, resto de autoridades, señoras y señores. Yo creo que no hay nada más grato en la política y en la vida que ver cómo un gran proyecto se convierte en una gran realidad.

Hoy creo que es un día de esos en los que podemos tocar con las manos el fruto del trabajo, que no era tan evidente, la voluntad de quienes creyeron en este proyecto desde el primer momento, de quienes supieron ver lo que merecía la pena y lo que merecía la pena luchar por hacer posible algo como lo que hoy estamos celebrando. Este proyecto, a mi juicio, es el mejor ejemplo de la buena política, Diría que de la mejor política. La política que crea industria, que crea empleos de calidad, que transforma todo un territorio, que le brinda en consecuencia oportunidades a ese territorio.

Y por esa razón creo que es de justicia, señoras y señores, comenzar honrando a quien más luchó por hacer realidad este proyecto y este día. Y créanme si les digo que sé bien a que me estoy refiriendo, al entonces presidente Guillermo Fernández Vara. El empeño de Guillermo creo que ha sido decisivo. Lo sabe bien Lei, lo sé yo también, no solo por embarcar a España y a su Gobierno en esta iniciativa empresarial, sino por materializar la que es, sin duda, una gran victoria colectiva para Extremadura. Una victoria contra la deslocalización y por la reindustrialización industrial, una victoria contra el declive industrial, no solamente de España sino también de Europa, que golpeó precisamente a esta ciudad, a Navalmoral de la Mata, en sectores tan emblemáticos como por ejemplo, el sector textil hace justo una década. Y por el camino hubo que promover, lo sabe bien Guillermo, reformas legales como la ordenación territorial y urbanística. Hubo que impulsar otras, como por ejemplo la ley de Simplificación y Racionalización Administrativa, sacar adelante una nueva regulación sobre la cadena de valor del litio, del hidrógeno verde. En definitiva, lo que quiero trasladarles es que todo lo que hiciera falta y más para que este proyecto saliera adelante.

Un proyecto que sin duda alguna va a impulsar a esta comarca, no solo porque como saben ustedes, va a crear 900 empleos ya en su fase inicial, sino porque posiciona Extremadura, y esto es lo que a mí me parece más ilustrativo de lo que estamos hoy presentando, como referente en una tecnología de vanguardia. Esta iniciativa, a mi juicio, es el mejor ejemplo de la apuesta que está haciendo el Gobierno de España por reindustrializar nuestro país, aprovechando esa doble transición verde y digital; por abrir las puertas a la inversión extranjera que quiere comprometerse con la creación de empleo, la creación de empresas y, en consecuencia, con la generación de riqueza que no se debe de acumular en pocas manos, ni físicas ni territoriales, sino que se tiene que expandir por todos y cada uno de los territorios de nuestro país. Apostar, en consecuencia, por sectores que garanticen empleo estable, digno y de calidad, como hoy estamos haciendo.

España creo que merece la confianza con que se nos valora desde fuera. En muchas ocasiones sucede esto, que no nos valoramos tanto como se nos valora desde fuera, los avances, los logros que estamos alcanzando y, en consecuencia, la confianza que lleva a Envision AESC a impulsar este proyecto en Extremadura. La confianza que inspiramos, liderando el crecimiento entre las grandes economías europeas, en un contexto geopolítico muy difícil. Liderando también el que creemos cuatro de cada diez empleos nuevos empleos de la Unión Europea aquí en España.

Yo creo, señoras y señores, que España es una gran potencia -también lo ha dicho precisamente el CEO de AESC- del sector del automóvil. Simplemente por dar algunos datos: somos el segundo mayor productor de Europa y el octavo exportador del mundo, contamos con 17 fábricas de automoción en diez comunidades autónomas, 15 centros tecnológicos, diez 'clusters' de automoción. Para que nos hagamos una idea, solamente en el año 2023, el sector español de la automoción superó los 44.000 millones de euros en exportaciones, 44.000 millones de euros.

Y esta gigafactoría, que se va a construir aquí, en Navalmoral de la Mata, en Extremadura, contará con una inversión cercana a los 1.000 millones de euros, en su primera fase. Para dar un mayor impulso a estas cifras a partir de tres aspectos esenciales que a mí me gustaría destacar ante todos ustedes. El primero de ellos es, como he dicho antes, que este proyecto lo que hace es confirmar la apuesta de España por la movilidad sostenible como una extraordinaria oportunidad de desarrollo social y territorial. Lo que vamos a hacer es adaptar nuestro tejido productivo a esa movilidad sostenible, limpia, segura, que es evidentemente mucho más que una exigencia económica. Es necesario para adaptarnos ante los efectos del cambio climático, como saben ustedes, y evidentemente es el mejor ejemplo de la transición ecológica como acelerador de oportunidades.

Por ese motivo, y antes ha hecho referencia el CEO de AESC a ello, hemos destinado más de 5.000l millones de euros en sucesivas convocatorias del proyecto estratégico vinculado con el vehículo eléctrico y conectado y con una capacidad de movilizar nada más y nada menos por valor de 24.000 millones de euros de inversión total. Es decir, ese es el apalancamiento de inversión privada que estamos logrando, gracias a la movilización sin precedentes de recursos vinculados con el sector de la automoción y con su transformación. Acabamos de lanzar dos nuevas convocatorias, de ayudas, de iniciativas en la producción del vehículo eléctrico y van a contar con la continuidad gracias al lanzamiento del PERTE VEC 4, dotado nada más y nada menos que con 1.250 millones de euros. En primer lugar, la apuesta decidida de España por la transformación de nuestro sector de la automoción en favor del vehículo eléctrico y de la movilidad sostenible.

La segunda de las cuestiones que me gustaría compartir con todos ustedes es que esta factoría creo que representa la concreción de un objetivo crucial para todo nuestro país -y diría también que para el conjunto de Europa-, y es la reindustrialización de nuestro tejido productivo. Y esto es muy importante porque hemos aprendido muchas cosas de la pandemia, y no solamente de la pandemia, también de las consecuencias económicas y sociales de la guerra y de la invasión de Putin en Ucrania. Se trata de ganar eso que hemos llamado los europeos 'autonomía estratégica', en un sector clave como es el sector de la automoción para nuestro país. Y de hacerlo, además, desde -y es donde quisiera poner el énfasis- la colaboración público-privada.

Creo que es oportuno hacer esta reflexión precisamente ahora, cuando volvemos a escuchar ciertos discursos cargados de recelo hacia lo público, discursos que ignoran una evidencia palmaria y es la contribución decisiva del sector público en toda gran transformación industrial o tecnológica a lo largo de la historia. Echemos un vistazo hacia atrás: de Internet, a la investigación biomédica; de la aeronáutica, a la ingeniería civil; de la tecnología espacial, al impulso -como estamos haciendo hoy aquí en Navalmoral de la Mata, en Extremadura-, al vehículo eléctrico. En cada salto tecnológico que ha dado la humanidad, lo público ha operado como un acelerador histórico, como pudimos comprobar con la fabricación de la vacuna para vencer al COVID 19.

Con esa misma vocación de impulso desde lo público vamos a redoblar nuestra apuesta por algo que han dicho precisamente el resto de intervinientes que me han precedido, y es la inversión en capital humano, que es fundamental para este proyecto. Fíjense, gracias al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, y los fondos europeos que estamos destinando también -no solamente en España, sino a Extremadura-, solamente en esta tierra, en Extremadura, hemos creado nada más y nada menos que 6.000 nuevas plazas de Formación Profesional. De ellas, 257 van a corresponder a tres centros educativos aquí en Navalmoral de la Mata. Y una cifra más, casi el 40% en ámbitos como los sistemas electrotécnicos, automatizados, las baterías de vehículos eléctricos, la inteligencia artificial, el big data, la micro informática, las redes...En definitiva, lo que quiero decir es que todas esas plazas de formación profesional están vinculadas -estoy convencido- a todos aquellos sectores que van a necesitar, no solamente esta tierra, sino también la economía española en un futuro muy próximo.

Y, por último, este proyecto es -sin duda alguna- un ejemplo de compromiso con Extremadura, de compromiso con las oportunidades de esta tierra, con el sector industrial; no con un sector industrial cualquiera, con un sector industrial de auténtica vanguardia. Fíjense, durante décadas esa expresión de industria de vanguardia parecía acotada a unas zonas muy concretas de nuestro país, siempre las mismas, y mientras tanto, que sucedía que regiones enteras como Extremadura quedaban injustamente relegadas y limitadas al papel de proveedoras de mano de obra. Se asumía con resignación que el futuro pasaba por emigrar a otras regiones. Y no, lo cierto es que nadie abandona su tierra por capricho y, si uno lo hace, es como consecuencia de la falta de oportunidades. Por esa razón, hoy el alma de Extremadura también vive en territorios como Cataluña, como Madrid, como Euskadi... territorios cuya prosperidad debe mucho a lo mejor de esta tierra de Extremadura, su gente.

Y, por eso, este Gobierno, el Gobierno de España, está situando la cohesión territorial y, por tanto, el desarrollo armónico entre territorios como uno de nuestros principales objetivos de política económica. Porque necesitamos -y merece la pena- vertebrar nuestro país y llevar oportunidades donde otros llevaron olvido. Hoy podemos decir con orgullo que Extremadura -y quédense con esa cifra concreta- el 14% del total de ayudas concedidas por el PERTE VEC; siete veces más de lo que correspondería a esta tierra por su peso demográfico. Y detrás de este volumen de recursos hay proyectos muy ilusionantes, yo diría que súper ilusionantes, como el Lithium Iberia o el de Tecnología Extremeña del Litio, con más de 32 millones de euros -se dice pronto- en subvenciones para la producción de Hidróxido de Litio; el desarrollo del Centro Ibérico de I+D en Almacenamiento Energético en Cáceres; o el proyecto Gamma Solutions.

Y, además, esta planta tendrá un impacto no solamente decisivo, yo creo que va a ser absolutamente transformacional en lo que representa la atracción de más empresas del sector. Será, estoy absolutamente convencido, la primera piedra en la creación de eso que llaman algunos 'el ecosistema en torno a la cadena de valor', en este caso del vehículo eléctrico, nada más y nada menos que aquí, en Extremadura. Hoy es un gran día. Celebrémoslo como tal porque es un gran día para el presente y el futuro de Extremadura. Así es como Extremadura va a convertirse en algo inimaginable apenas unos años atrás -no estoy refiriéndome a un siglo atrás, sino unos años atrás- en un referente europeo e internacional en la automoción del futuro.

Concluyo con un mensaje de profunda gratitud a Envision-AESC (Lei) por vuestro acompañamiento en sacar adelante una iniciativa que va a traer progreso, riqueza y empleo a esta tierra. Esta factoría, si es algo, es la prueba tangible de las oportunidades que ofrece la transición ecológica para nuestro país, si sabemos aprovecharlas y somos consistentes con esa prueba. Desde luego, el Gobierno de España sí lo es, y como recordaba al comienzo de mi intervención, creo que es un ejemplo de todo lo que podemos conseguir los españoles, y particularmente los extremeños y extremeñas, con tenacidad y con empeño. Y, también, creo que es un buen ejemplo de todo lo que podemos conseguir como país con la voluntad de unión y de acuerdo entre todas las administraciones públicas: la estatal, la autonómica, la provincial -que en muchas ocasiones se nos olvida-, también la local, para hacer posible lo que no hace tanto parecía abstracto, lejano o incluso ilusorio. Así que sigamos por ese camino, porque solamente por ese camino traeremos buenas noticias a Extremadura y a España.

Gracias.

(Transcripción editada por la Secretaría de Estado de Comunicación)