Desde que España entrara en el Consejo de Seguridad, el 1 de enero de 2015, asumió la exigente condición de redactor del expediente de Siria en su capítulo humanitario, junto con Nueva Zelanda y Jordania (en 2015) y después con Egipto (2016).
Junto con dichos países, España no ha escatimado esfuerzos por intentar que el Consejo de Seguridad asumiera su responsabilidad como garante prioritario de la paz y seguridad internacionales. Ante la complejidad de la situación en Siria, la Resolución 2332 puede representar una contribución a la protección de civiles en Siria.
Por otra parte, la Resolución reitera que la situación humanitaria seguirá deteriorándose a falta de una solución política del conflicto en Siria, e insiste en la exigencia de que haya una transición política siria en consonancia con el comunicado de Ginebra de 2012 y la resolución 2254 del Consejo de Seguridad.
La situación humanitaria en Siria seguirá siendo objeto de atención prioritaria para España una vez deje su puesto en el Consejo de Seguridad, a partir del 1 de enero de 2017.